Redacción. La Unidad de Protección de la Salud (UPS) del Distrito de Atención Primaria Condado-Campiña ha llevado a cabo durante el mes de mayo más de 200 actuaciones encaminadas a preservar la salud de la población que ha acudido a la pasada edición de la Romería del Rocío. Sus profesionales han asumido la labores de prevención y protección de la salud tanto en materia ambiental como de seguridad alimentaria dentro del dispositivo sanitario de la Junta en el marco del Plan Romero 2023.
En este evento se dan una serie de circunstancias excepcionales como consecuencia de la elevada concentración de personas y animales. El trabajo de los agentes de Salud Pública del distrito sanitario onubense tiene como finalidad primordial evitar o reducir la aparición de peligros para la salud atribuibles a los establecimientos alimentarios (temporales y permanentes), a un consumo desproporcionado de agua de la red pública o a una situación que pudiera derivar en una insuficiente dotación de los servicios mínimos de saneamiento e higiene en la aldea de El Rocío.
Para lograr este objetivo, se han realizado actuaciones de protección de la salud en dos periodos diferenciados: tanto antes de la romería como durante la celebración de la misma en la aldea (día 25 a 28 de mayo).
En los días previos a la romería, se procedió a la inspección sanitaria de todas las infraestructuras de la zona de abastecimiento de agua en la aldea, se tomaron muestras de agua de la totalidad de los pozos destinados a abastecer a la población y se comprobaron las condiciones higiénico-sanitarias de las fuentes públicas en el camino de las hermandades que proceden de la provincia de Cádiz, seguida de la correcta rotulación. Se comprobó además que las instalaciones de la estación depuradora de aguas residuales cumplían las condiciones de vertido y tenían la capacidad suficiente para realizar el saneamiento de las aguas residuales en el Rocío.
También con carácter previo a la romería, se efectuaron 52 inspecciones basadas en riesgo en establecimientos con actividad alimentaria y 20 seguimientos en aquellos que tras la primera visita presentaron deficiencias, detectándose 2 con deficiencias graves y 15 con deficiencias leves. Una vez completados los seguimientos, sólo 4 seguían presentando deficiencias de tipo leve. Igualmente, se inspeccionaron 18 establecimientos con instalaciones de riesgo de legionelosis y se realizaron 5 seguimientos en aquellos que presentaron deficiencias leves, después de los cuales ninguno presentó incumplimientos.
Por último, se recabó información sobre las áreas de servicio, sistemas de recogida de residuos sólidos y establecimientos permanentes o temporales con actividad en los días de romería.
Tras finalizar las intervenciones anteriores, se diseñó un protocolo de actuación aplicable a los días de la romería, cuando se produce la mayor concentración de personas, detallándose las actividades diarias e iniciativas a tomar en situaciones de emergencia, y se elaboraron documentos de recomendaciones para las hermandades acampadas durante la romería, chiringuitos o establecimientos de temporada.
Seguimiento continuado
Durante los días de celebración de la romería en El Rocío, dos profesionales de la UPS del Distrito, un farmacéutico y un veterinario del cuerpo A4 del Servicio Andaluz de Salud (SAS), permanecieron presencialmente en la aldea desde el día 25 al 28 de mayo para garantizar un seguimiento continuado de la potabilidad del agua de la red, con 59 determinaciones de desinfectante residual en distintos puntos de la red de distribución (todas conformes), y revisar el autocontrol esos días por parte del operador responsable de la gestión de la zona de abastecimiento de agua.
En paralelo, hicieron 22 inspecciones a los 19 establecimientos temporales instalados en la aldea, comprobando de manera especial que todos tuvieran dotación de agua de consumo público y de vertido de aguas residuales a la red de saneamiento, así como aquellas características que pudieran contribuir a la aparición de brotes de enfermedades transmitidas por alimentos (temperatura de conservación, momento de preparación, posibilidad de contaminación cruzada, condiciones de limpieza y desinfección, condiciones de descongelación o recalentamiento o cantidades de alimentos elaborados). Tras las inspecciones a estos establecimientos, 17 resultaron deficientes y en todos ellos se intervino de forma inmediata para su subsanación.
Asimismo, hubo un seguimiento continuado del estado de saneamiento de las aguas residuales, recogida de residuos sólidos y dotación y condiciones higiénico-sanitarias de las áreas de servicio.
En las labores de vigilancia no fueron necesarias acciones de control y seguimiento de brotes de intoxicaciones alimentarias y/o hídricas en establecimientos públicos.