José Manuel Alfaro / Sección de ficción ‘El Cuaderno de Muleman’. Si no llueve en las próximas semanas la Sirenita de Zufre deberá ser trasladada a un lugar seguro en el que su vida no se vea comprometida. Con estas palabras la confederación hidrográfica ha querido en una rueda de prensa convocada de urgencia comunicar a la sociedad que no solo está en peligro la calidad del agua y el abastecimiento para consumo humano, sino que a medida que la situación de sequía se agrava por la falta de precipitaciones esta podría terminar provocando daños irreversibles a las especies acuáticas, pero especialmente a una de las últimas sirenitas de agua dulce que quedan en la Sierra.
Un Sirenita que se trasladó desde Dinamarca a Zufre, gracias a la intervención de un tataranieto del escritor y poeta danés Hans Christian Andersen que fue uno de los primeros escritores que localizo en abril de 1837 a una de las pocas sirenitas que poblaban las aguas cristalinas de las cuencas danesas.
Como todo el mundo sabe las sirenitas pueden vivir cientos de años, así que esta llegó adulta con solo 150 años al pantano de Zufre una vez finalizadas las obras en 1987 después de cuatro años de construcción que permitieron crear un entorno ideal para esta sirenita gracias a la calidad de las aguas, la superficie del embalse con más de 968 ha y sus 175 hm3, algo que ha hecho posible que la provincia y la Rivera de Huelva cuenten desde entonces con la única sirenita conocida de la provincia.
Ante la situación de emergencia provocada por la prolongada sequía los técnicos de la Confederación están diseñando el Plan de Evacuación de Sirenitas (PES) dado el delicado estado de salud de una de las sirenitas más longevas que se conocen. Un plan que podría contemplar desde el traslado a una de las piscinas más grandes y lujosas en una de las fincas más conocidas de la zona, al acuario más cercano donde podría atenderse por un equipo médico especializado en sirenitas las veinticuatro horas al día o trasladada a un embalse al norte hasta que mejore las condiciones hídricas del pantano de Zufre, un traslado que en cualquier caso se tendría que hacer en condiciones especiales de seguridad y confort que garantizasen su salud.
Según ha podido saber este cuaderno de fuente cercanas, Sirenita se encuentra en estos momento abatida ante la incertidumbre que se cierne sobre ella debido a esta situación de sequía que está poniendo en peligro al que ha sido su hogar desde hace más de 25 años, una situación que se podía retrasar si empezara surtir efecto las acciones que se han puesto en marcha, una vez declarado por la Confederación el estado de alerta de sequía y que incluye medidas como la prohibición del uso potable para el riego de jardines, praderas, árboles, zonas verdes y deportivas, de carácter público y privado, baldeo de viales, llenado de piscinas, estanques y fuentes, privadas o públicas y el lavado con manguera de toda clase de vehículos.
Mientras tanto en la localidad los vecinos y vecinas de la localidad se movilizan por si tuvieran que utilizar la piscina municipal para acoger a uno de los seres más fantásticos y mágicos de Zufre.