Redacción. La Comunidad de Regantes Palos de la Frontera, en el marco de su campaña #LaSequíaSePuedeEvitar, ha solicitado el impulso de la construcción de desaladoras en la provincia de Huelva para poder aprovechar el agua para regadío con un recurso prácticamente inagotable como es agua del mar, y como complemento al resto de infraestructuras generales que están pendientes de realizar.
“Tenemos la suerte de vivir en una provincia costera y con importantes cultivos muy cerca de la costa, lo lógico es pensar en este recurso y comenzar a proyectar desaladoras de cara al futuro próximo, especialmente si queremos prepararnos para temporadas de sequía más largas y severas”, han señalado los responsables de la CR Palos.
Para los responsables de la Comunidad de Regantes Palos de la Frontera “es el momento de empezar a pensar en estos recursos ya que, aunque no nos vayan a salvar para la próxima cosecha dado que los tiempos de ejecución de las obras no podrían ser tan inmediatos, sí que ayudarían a que la provincia de Huelva tuviera una garantía de futuro para periodos de escasez hídrica como el que estamos viviendo”. “Poder contar con una o dos desaladoras en puntos estratégicos del litoral onubense y conectadas al sistema general de distribución de la Demarcación Tinto-Odiel y Piedras nos podrían aportar grandes ventajas para mejorar, garantizar y aumentar la capacidad de suministro de agua a toda la sociedad onubense. Se podría convertir en un nuevo Bocachanza gestionado por la propia provincia sin tener que depender de los portugueses”. Además, estos proyectos se pueden realizar con el suministro de energías renovables por lo que los costes de producción se mejoran sustancialmente.
Desde la CR Palos, aseguran que es necesario poner sobre la mesa este debate para Huelva y ha recordado que en provincias como Murcia, Almería o Castellón las desaladoras ya son una realidad y ayudan a los agricultores a sacar adelante sus cosechas. La demanda de agua marina desalinizada para riego se ha incrementado considerablemente en el Sudeste de España en los últimos años, debido sobre todo a la grave situación de escasez de recursos hídricos que está sufriendo. Como dato indicar que en 2017 el consumo de agua marina desalinizada del regadío en la Cuenca del Segura fue de unos 150 hm3.
Es más, desde la CR Palos han señalado como ejemplo a las Islas Canarias donde llevan más de 40 años utilizando la desalación del agua de mar y hoy cuentan con más de 300 desaladoras que hacen que este territorio sea “autosuficiente en el abastecimiento de agua” pese a que no cuenta con ríos y tiene una escasa pluviometría.
Desde la CR Palos han recordado que el cultivo de frutos rojos se enfrenta a uno de los mayores problemas que ha sufrido a lo largo de su historia y que ya está sufriendo restricciones del 25% en el regadío. En el caso de que no lleguen lluvias, el cultivo podría alcanzar la próxima campaña restricciones del 50% lo que supondría una “catástrofe económica”.