Redacción. La Comunidad de Regantes Palos de la Frontera, en el marco de su campaña #LaSequíaSePuedeEvitar, ha solicitado el impulso de las obras de la prensa de Alcolea para salvar a Huelva de “una futura ruina” que puede venir generada por la falta de lluvias y la escasez de infraestructuras para aprovechar los recursos hídricos con los que cuenta la provincia.
Según han indicado desde la CR Palos, estas obras son “de vital importancia para la provincia de Huelva” especialmente para la Demarcación hidrográfica del Tinto-Odiel-Piedras y supondría aprovechar más de 150 hectómetros cúbicos más gracias a la regulación de los ríos Odiel y Oraque permitiendo el aprovechamiento de agua que actualmente “se tira al mar” y servirá incluso para liberar recursos del Chanza.
Desde la CR Palos han recordado que las obras se adjudicaron y se iniciaron en 2012 con una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) favorable que sigue en vigor y con presupuesto para su ejecución, pero problemas administrativos y la desidia del Gobierno de España mantiene la presa sin ejecutar.
Sin embargo, “no existe una razón objetiva para no reiniciar y finalizar esta presa que cuenta con todos los parabienes legales” por lo que se achaca a “la falta de voluntad política” y a la “irresponsabilidad del Gobierno actual” el hecho de que “hoy no contemos con una infraestructura de primera necesidad y que sería de vital importancia para garantizar el futuro económico de la provincia”.
De igual modo, desde la CR Palos han recordado que el proyecto de la presa de Alcolea está incluido dentro de la Ley del Trasvase al Condado, aprobada en 2018 por el Gobierno de Pedro Sánchez y que por tanto es una garantía para “llevar el agua superficial a Doñana para acabar con los problemas hídricos de su acuífero, y consolidar los regadíos de toda su comarca”, razón de más para ponerla en marcha con la mayor urgencia posible.
La presa de Alcolea, tendrá una altura de 65 metros y una longitud de coronación de 520 metros con una capacidad de embalse de 274 hectómetros cúbicos.
En plena época de sequía y con restricciones del 25% en el riego, no se está utilizando este recurso que hubiera sido “importantísimo” ya que la situación excepcional puede suponer una “catástrofe económica para la futura campaña” especialmente si continúa sin llover y se alcanzan restricciones del 50% como contempla la legislación.
Desde la Comunidad de Regantes Palos de la Frontera estiman que es “precisamente en época de sequía cuando más hay que incidir en las obras de regulación” por lo que no se entiende la actual política gubernamental que opta “por destruir presas en lugar de construirlas”
Según fuentes del propio ministerio de Transición Ecológica se han derribado una veintena de presas en los últimos meses como las de Anllarinos en León, Yecla en Salamanca, Inturia en Navarra, Río Torío en León, Las Pericas en Albacete, Narboneta en Cuenca o Robledo de Chavela en Madrid. Además penden de un hilo las de Valdecaballeros en Badajoz y Los Toranes en Teruel. La lista completa de azudes, presas, molinos, piscinas, pasos y estaciones y cruces suprimidos por el Gobierno asciende a 559.