José Manuel Alfaro / Sección de ficción ‘El Cuaderno de Muleman’. Las altas temperaturas, la baja humedad y los fuertes vientos de los últimos días nos han recordado que ahora más que nunca debemos extremar las precauciones ante el riesgo extremo de incendios forestales en el que nos encontramos y que podrían afectar no solo a nuestros montes sino también a urbanizaciones y en algunos casos incluso a seres tan queridos como los dos vecinos de Punta Umbría que se vieron afectados por el incendio del pasado miércoles en la Laguna del Portil y que gracias a la rápida intervención de los servicios de extinción forestal se encuentran fuera de peligro.
Un fuego que comenzó a las 18:00 h en un momento en que las condiciones meteorológicas adversas debido a la dirección noroeste y la velocidad del viento que en algunos momentos de más de 20 km/h, una temperatura en la zona de 32 grados centígrados y una humedad relativa del 16%, un incendio, el más importante de la zona hasta ahora estabilizado a las 21.30 horas tras evolucionar favorablemente hacía su extinción y que ha afectado a 10 hectáreas de superficie forestal.
Aunque en un primer momento se pudo temer que el fuego pudiera terminar afectando a las urbanizaciones colindantes de la Laguna del Portil, la rápida incorporación de tres medios aéreos y más de 40 efectivos, lograron controlar un incendio que estaba afectando a una masa de pino piñonero y matorral mediterráneo, un dispositivo al que también se incorporó dos autobombas, un técnico de Operaciones y dos agentes de Medio Ambiente, estos últimos fueron los que pudieron rescatar a dos vecinos de Punta Umbría que se encontraban en ese momento en las inmediaciones del incendio.
Dos vecinos que como en la fábula de Esopo de “La cigarra y la hormiga” y que más tarde recreara Jean de La Fontaine y Félix María Samaniego, se encontraban, la primera cantando por la zona mientras la segunda, la hormiga trabajaba intensamente para recopilar provisiones para el invierno. En las inmediaciones de la laguna donde los rescataron estos agentes de Medio Ambiente que pudieron sacarlas de allí antes de quedar atrapadas por el incendio. Por suerte en estos momentos se encuentran fuera de peligro y se recuperan de un suceso que estuvo a punto de acabar con su vida si no fuera por la rápida intervención de estos dos heroicos agentes.
En estos momentos La Cigarra y la Hormiga se encuentran descansando y recuperándose en la casa de la hormiga a la espera de que ambas puedan regresar otra vez al monte, La Cigarra a seguir cantando y La Hormiga a seguir buscando provisiones para afrontar los momentos de escasez y que nos han recordado que ahora más que nunca es necesario que extrememos las precauciones y respetemos las recomendaciones que los servicios de prevención y extinción de incendios forestales y que en caso de incendio nos pongamos en contacto inmediatamente con los servicios de emergencia, para que ninguna cigarra y ni ninguna hormiga de este cuento puedan volverse a ver afectadas.
