RFB. Nos citamos en un lugar emblemático, quizá en el corazón de esta ciudad milenaria, un sitio que ha elegido él, Gabriel Cruz, el alcalde de Huelva. Estamos en La Cinta. Charlamos un rato con un punto de partida, el bicentenario de la Diputación Provincial y la condición capitalina de la ciudad que rige en esta su segunda legislatura, a la que restan pocos meses.
Cruz nació en Minas de Río Tinto pero con tan solo seis años, en julio de 1970, llegó a Huelva. Sus recuerdos infantiles, su crianza, sus primeros amigos se sitúan ya en nuestra ciudad, con un referente especial en la Escuela Francesa, su ámbito escolar y de primeros juegos. Cuando le preguntan dice que es de Huelva y nacido en Río Tinto, orgulloso en todo caso de ello. Su padre trabajaba en la Fundición de Río Tinto y cuando esta se trasladó a Huelva se afincó definitivamente aquí con su familia.
Atentos al primer propósito le preguntamos que cómo cree que ve la gente de la capital a la provincia onubense. En su respuesta nos da a entender que el orgullo es un sentimiento característico. Los ciudadanos de la capital se sienten orgullosos de ella pero sin menoscabo del orgullo que experimentan por una provincia tan maravillosa. Destaca que «Los capitalinos ven a la provincia con admiración, sin soberbia ni superioridad. Experimentan el placer de mostrar también la provincia a los que nos visitan, con ese sentimiento de orgullo. Un sentimiento de capitalidad muy integrador, muy de compartir esa identidad provincial«.
Le damos la vuelta a la cuestión e inquirimos sobre la percepción que de la capital tienen los habitantes del resto de la provincia. Gabriel entiende que hay un sentimiento recíproco a lo anterior.
«Yo creo -apunta- que en estos últimos años (al menos nosotros nos estamos esforzando mucho en ello) hemos mejorado muchísimo, se ha avanzado mucho y por muchas razones. Creo que se ha avanzado mucho en ese sentimiento de orgullo por la capital que tiene toda la provincia. Hoy la provincia de Huelva también se siente orgullosa de su capital”.
Añade que «antes podría percibirse una especie de desconexión, no de darle la espalda a la capital pero si de desconexión. Hoy hay muchas cosas de la capital que hacen sentirse orgullosos a los comprovincianos. Todas esas cosas en las que hemos ido avanzando… la capitalidad gastronómica, el concurso Binómico, el Recreativo de Huelva, por supuesto. Ahora la Navidad, que trae muchísima gente de la provincia a la ciudad de Huelva, y que disfrutan mucho y ya no miran tanto a otros sitios«.
Le preguntamos si ha pensado en el hecho histórico del nombramiento de capital y el debate que se produjo hace doscientos años. Bien podría haber sido Valverde, Moguer o Ayamonte capital de esta provincia, en vez de Huelva.
Admite que lo ha pensado y que es consciente de que probablemente en esas fechas esas ciudades citadas tenían incluso más peso que la villa de Huelva. Pero cree que la designación final fue una decisión inteligente. Una buena decisión sobre todo por las posibilidades, por las expectativas de futuro que tenía el enclave que a la postre sería capital. A su juicio fue entonces más una opción de futuro que de aquel presente.
Cruz nunca imaginó que sería alcalde de Huelva. Estudió Derecho aunque llegó a pensar en Ingeniería de Caminos e incluso Periodismo. Cree que tiene suerte porque la elección final respondía mejor a sus cualidades personales, de modo que ha sido muy feliz en el ejercicio de su profesión, desempeñada en primera instancia durante catorce años, antes de entrar en política. Considera ser alcalde un inmenso honor, «representar a lo que más quieres, a tu ciudad, a tu gente» -resalta-.
Estaba a gusto como abogado pero le plantearon asumir la Delegación Provincial de Justicia y aceptó, en el deseo de aportar en un sector que conocía con esa experiencia ya adquirida. Entró de este modo en política y más tarde llegó a la municipal. «Una vez que estás ahí -nos dice- entonces ya empiezas a valorar el trabajo de tus antecesores. De Pedro Rodríguez, de Juan Ceada, de José Antonio Marín, incluso de los anteriores… Carmelo Romero, Federico Molina o Diego Sayago«.
Añade que «te das cuenta de que una ciudad es diferente. No tiene nada que ver con los formatos filosófico-políticos en los que uno se puede ubicar. Esto nos duele a todo el mundo, nadie quiere más a Huelva pero tampoco menos, y te das cuenta que estás trabajando porque sea algo mucho mejor y para el bien de todos, para el disfrute de todos. Y, además, eres consciente de que recoges un legado muy importante de los antecesores y que vas a dejar también un legado muy importante para el que lo continúe«.
Afirma Gabriel Cruz que a los anteriores alcaldes de Huelva les tiene muchísimo respeto, que les tiene mucho cariño, y reconoce la grandísima labor que han realizado todos, sin excepción. «Esto no es una cuestión de partidos» -señala-. Y hablando del periodo más reciente, el democrático, entiende que José Antonio Marín hizo un trabajo enorme. Para él Juan Ceada continuó y profundizó con un trabajo fantástico. Y Pedro Rodríguez considera que hizo un trabajo increíble, genial. «Y nosotros, modestamente -concluye-, intentamos seguir en esa mejora, y en esa ambición constante por defender y preservar nuestras señas de identidad, pero mirando siempre hacia el futuro«.
En las dos legislaturas que ha regido como alcalde ha vivido muchos momentos emotivos. Le pedimos que destaque alguno. Le cuesta, dice que son muchísimos. No obstante, señala algunos. Nos dice que «es muy difícil disociar lo que tú sientes como alcalde de lo que luego sientes como persona. Por ejemplo, como cofrade he sentido y siento momentos muy muy especiales, con todas y cada una de las Hermandades y con el Consejo. Me sentí muy emocionado cuando el Consejo me impuso su medalla, era una culminación a todo lo vivido con las Hermandades y algo muy especial porque es en lo que uno milita«.
También se emocionó mucho Gabriel Cruz, según nos comenta, cuando Huelva se alzó con la capitalidad gastronómica. Recuerda también que «uno de los momentos seguramente más emocionantes fue cuando sacamos en el Pleno Extraordinario de diciembre de 2018, sacamos adelante al Recre. Se habían dado pasos formales, como era la expropiación, pero el Recre necesitaba salvarse. El Recre estaba ‘muerto’ y había que dar el paso decisivo, un paso no exento de audacia, de valentía y riesgo. Fue un momento muy complicado«.
En este sentido añade que «y aunque lo que se hacía contaba con rigor, fue algo muy difícil. No disponíamos de la mayoría absoluta que tenemos ahora y fue muy, muy complicado. Yo creo que todas aquellas personas que levantaron la mano a favor del Recreativo de Huelva prestaron un servicio increíble para que el Recre abordara esa transición desde la muerte hasta la vida, y recuperar el sitio que deportivamente nunca debió perder, pero sin que haya desaparecido. Otros clubes para volver a llegar donde tenían que llegar tuvieron que desaparecer. Nosotros lo estamos haciendo sin perder las señas de la identidad, sin perder el decanato«.
Una vez con la mente en estas experiencias emocionales al alcalde se le viene a la cabeza una que califica como impresionante. Cree que es el día que más se ha emocionado de su vida, no solo como alcalde. Sucedió cuando habían rehabilitado viviendas en Pérez Cubillas y correspondió entregársela a una señora mayor, que superaba los noventa años, Isabel le parece recordar que se llamaba.
Gabriel nos habla y se emociona otra vez recordando. «Esa señora –espero que esté con nosotros todavía- tenía noventa o noventa y tantos años. Yo pensaba… esta mujer no ha tenido una vivienda digna en su vida… ¡en su vida! Siempre en la infravivienda, sufriendo, sacando adelante a su familia, con numerosos problemas en ella, y esa mujer se le veía en la cara… no se creía que iba a poder vivir en un espacio propio, modesto pero digno, con una instalación eléctrica en condiciones, con un baño en condiciones…«.
Cambiando de tema comentamos que es natural que un alcalde cante las bonanzas de su ciudad, pero también hay que ser conscientes de sus debilidades para, en su caso, actuar. ¿Cuales son las debilidades de Huelva?
Responde sin dudar, «las infraestructuras de comunicación, de transporte, todos lo sabemos. Es algo de carácter estructural que provoca carencias de segundo grado. Se puede llegar a Huelva, pero la forma en la que se puede hacer no es competitiva. Llegar y también salir, limitadas conexiones con pocos horarios sobre todo los trenes. Si quieres tener posibilidades tienes que desplazarte a Sevilla y viajar desde allí. Y no es una cuestión de complejo, sino que eso nos lastra y nos condiciona en todos los sentidos«.
Es contundente Gabriel Cruz cuando afirma que «tenemos que dar un paso más en reivindicar infraestructuras para Huelva, da igual quién esté gobernando en Madrid o en Andalucía. El Gobierno de España porque es quien tiene que tirar adelante con esas infraestructuras, y el de la Junta porque ha de considerar prioritaria, dentro de Andalucía, esta subsanación cuando negocie con Madrid. Y creo que no debemos limitarnos a hacer declaraciones grandilocuentes, es una cuestión de trabajo constante a favor de ese cambio en el estado de las cosas. Y también trabajo desarrollando proyectos aquí para atraer a visitantes y actividad, que creo que estamos haciendo. Pero el tapón está, como he dicho, en las infraestructuras«.
Comentamos con el alcalde que no entendemos cómo en el periodo democrático ha sido imposible un pacto por Huelva entre los responsables de los distintos partidos políticos en nuestra provincia y también en la capital. Algo inverosímil teniendo en cuenta esas carencias referidas.
Él nos dice que «yo soy partidario de grandes acuerdos en las cosas que de verdad importan. Pasa en Huelva igual que sucede a nivel de España…por ejemplo, un pacto sobre la Educación –no podemos estar cambiando el sistema educativo cada vez que se produce un cambio de gobierno-, es una irresponsabilidad tremenda que no exista«.
Añade Gabriel Cruz que «creo que en Huelva si, ese pacto tiene más que sentido. Pero alejado de las mayorías absolutas, independiente de estas. Deberíamos trabajar juntos. Es complicado, pero sería muy bonito poder compartir gobiernos independientemente de las mayorías pero, si no, por lo menos, pactos de trabajo sinceros, con confianza. Tenemos que ir juntos, además, las instituciones y el sector privado. Superar ‘liderazgos contra..’ Yo lo digo siempre, yo no voy ni contra el gobierno de la Junta de Andalucía ni contra el gobierno de España. El gobierno de Juanma Moreno es mi gobierno, Juanma Moreno es mi presidente, al igual que el gobierno de Pedro Sánchez es mi gobierno y el presidente Sánchez es mi presidente, ya está. Ahora, si vamos a reivindicar y a exigir lo que nos corresponde«.
Gabriel Cruz augura un gran año 2023 para Huelva. Cree que se va a dar un salto decisivo en la ciudad, acorde con la transformación física, social y cultural que entiende se está produciendo. «se van a ir ya concretando, materializando muchísimos proyectos que están en marcha, que están en ejecución. Vamos a vivir un año desde ese punto de vista impresionante. Pero es que además yo estoy convencido que va a ser un año crucial, un punto de inflexión claro en el desarrollo de proyectos económicos de enorme calado. El proyecto de economía circular de Atlantic Copper, por ejemplo, y los proyectos relacionados con el Hidrógeno Verde, que van a tener en Huelva un epicentro«.
«Estos proyectos -advierte el alcalde- van a generar empleo pero, sobre todo, van actuar como iniciativas tractoras para constituirnos en un centro importantísimo en el sector energético«.
Ante la pregunta que le formulamos sobre cómo ve esta ciudad dentro de veinte años, Cruz responde que «Yo a Huelva la veo dentro de veinte años como una ciudad… Huelva es una ciudad muy bonita. A mí me revienta cuando dicen ‘es que Huelva no tiene ná’. Huelva tiene todo. Tener nada no es tener el Coliseo o la Giralda. Es no es. Está claro que eso hay que ir a verlo, … la Alhambra, maravillas. Pero es que Huelva tiene todo. Huelva tiene historia, Huelva tiene arqueología, tiene patrimonio, tiene luz, tiene gente, tiene gastronomía, tiene cultura, tiene tradiciones, tiene todo… tiene oportunidades de negocio. Es un lugar increíble para vivir.
Conozco a mucha gente, de muchos ámbitos profesionales, que vinieron pensando que iban a cubrir una etapa y al final se quedaron, mucha, mucha gente. Huelva es enorme, y Huelva va estar más hermosa porque Huelva va a dar un paso de gigante. Huelva dentro de veinte años yo la veo como un ejemplo de ciudad moderna. La veo como una ciudad en la que todas esas cosas que nos pegan pellizcos en corazón pues crezcan, como un lugar referente y que ha salido de ese ostracismo o de ese desconocimiento para tantísima gente. Es una ciudad que ya sorprende«.
Culminamos la entrevista preguntándole sobre cuáles son sus ilusiones. Responde de forma inequívoca que «me gustaría dentro de unos años emocionarme viendo crecer, progresar a mi ciudad y que la gente de Huelva sea feliz, se sienta feliz y se siga sintiendo orgullosa de Huelva«.
Gabriel Cruz – Huelva