HBN. La tecnología nos ha regalado una serie de elementos que nos hacen la vida más fácil, esto se evidencia en distintas áreas, y el trabajo no es la excepción. Ante el cúmulo de acciones a llevar a cabo día a día, no queda más que utilizar un sistema automatizado que facilite mucho esto, sobre todo, cuando se tienen trabajadores remotos.
Es en esos casos, un gestor de tareas se vuelve un apoyo insustituible. Gracias a su interfaz en línea, es posible administrar todo tipo de actividades desde cualquier lugar del mundo, realizando las asignaciones y la validación de lo cumplido en tiempo real.
Beneficios de usar los gestores de tareas
El principal beneficio está orientado a tener claridad y enfoque a la hora de ejecutar las actividades del día. Esto es una realidad para todos los miembros del equipo, desde el que administra, hasta el que tiene menos responsabilidades.
Otros beneficios asociados son:
- Mantener toda la planificación en un solo espacio de trabajo para verificar con facilidad lo que se ha avanzado y lo que falta por completar.
- Asignar a cada persona las tareas que le corresponde cumplir y así calcular un plazo estimado del tiempo de trabajo que lleva para que todo marche lo más equilibrado posible.
- Medir los avances de cada miembro del equipo en tiempo real. Este es un factor muy importante a la hora de trabajar con grandes proyectos que tienen una fecha establecida de entrega, como sucede con los lanzamientos, por ejemplo.
- Utilizar alertas que permitan detectar cuando no existen cambios en el estatus de las tareas asignadas a un empleado, en un determinado plazo de tiempo para realizar el seguimiento que corresponda.
- Trabajar con etiquetas de colores, que permitan ver con más sencillez la estructura de trabajo a seguir, y las acciones que se deben completar en cada caso.
Aspectos novedosos a valorar en los gestores de tareas
En sí, los gestores de tareas son un apoyo muy valioso para la correcta gestión de tareas. No obstante, esto es aún mayor al incluir ciertos beneficios adicionales, como por ejemplo:
- Disponer de una aplicación propia para que se puedan valorar todos los avances en tiempo real sin necesidad de estar conectados desde el ordenador.
- Contar con una extensión útil para trabajar en el navegador de Google Chrome y así ejecutar las acciones que correspondan desde la propia interfaz con mucha rapidez.
- Instalar una versión para escritorio descargable, que ayudará a llevar el control de todas las actividades con mayor facilidad.
Existen gestores de tareas que incluso son tan eficientes que permiten añadir estatus a los trabajadores según la posición en la que se encuentren en cada momento. Por ejemplo, si están ausentes por un día puntual o se encuentran de vacaciones.
Por otro lado, pueden facilitar los procesos que se realizan dentro de recursos humanos, ya que permiten visualizar con rapidez las horas extras trabajadas, el horario que cumple cada trabajador, según sus horas de conexión y desconexión, la emisión de encuestas y el reclutamiento de nuevo personal. Todo esto es posible controlarlo con informes bien organizados para facilitar la toma de decisiones.
Un gestor de tareas es un recurso de gran valor, no importa si se trata de una empresa con pocos o muchos empleados. La idea con su uso es tener más orden en los procesos, y por eso, es muy importante que la persona que se dedique a su administración, sea muy organizada, sobre todo cuando se trata de múltiples tareas que pueden ser clave para cumplir con un objetivo trascendental.