P. Gamero. “Me encanta que los planes salgan bien”. La frase preferida de Hannibal del ‘Equipo A’, y que se puede aplicar a la perfección al Sporting Club de Huelva, que con su plan trazado, aguantando el tipo, sabiendo defenderse con orden y dando el aldabonazo cuando más duele, se impuso (1-0) al UD Granadilla en la primera semifinal de la Copa de la Reina, lo que supone abrir la puerta de la Historia al acceder a su segunda final copera.
Con los números en la mano, con un visionado rápido del partido, se puede concluir que el cuadro canario llegó más al marco rival. Se puede decir también que Emily Dolan, portera del Sporting, se erigió en salvadora en varias oportunidades, que se tuvo esa pizca de fortuna tras un gol anulado al rival por unas manos previas y por un balón al palo. Pero también hay que poner en el guión del partido el enorme esfuerzo, el trabajo, el orden, las ganas, la fuerza y la ilusión de todo el equipo de Huelva, coronado con ese cabezazo de espalda de Patri Ojeda que acabó en la red y que fue el pasaporte para la final.
Hay que ser justos: Que el Sporting llegara sano y salvo al descanso fue una buena noticia. Cierto que ocasiones claras hubo pocas, pero quien estuvo más cerca del gol siempre fue el Granadilla, dominador del choque, y casi siempre pisando el campo onubense. Pero sin quitarle un ápice de mérito al orden defensivo del Sporting, que si bien se vio dominado, minimizó riesgos y dejó al cuadro tinerfeño un dominio tan abrumador como estéril.
El arranque del partido hizo ver algo que luego no ocurrió. Porque al lanzamiento de María José, antes de cumplirse el primer minuto, respondió el Sporting con una buena contra culminada con un disparo desde el borde del área de Edgren que salió fuera.
Fue a partir de ahí cuando el Granadilla comenzó a mandar sobre el terreno de juego, se hizo dominador -puede que fuera un dominio consentido-, y a obligar a aparecer a Emily Dolan. Como pasó al cuarto de hora, cuando la norteamericana sacó una excelente mano para despejar un remate de cabeza de Cristina Cubedo que llevaba veneno.
Sandra y María José volvieron a inquietar el marco onubense, que se salvó a la media hora al anular la gallega Gil Soriano un gol de Patri Gavira, dado que antes del remate hubo manos de la canaria y ex-jugador del Sporting.
De ahí al final se calmó el choque, el cuadro de Huelva, en el que Pau tuvo que entrar por la lesionada Ana Carol, equilibró el juego, y aunque no se le vio por las inmediaciones de Noelia Ramos, al menos la sensación de tanto dominio del rival remitió, ganando el descanso con ese 0-0.
A la vuelta de los vestuarios otra novedad en el once sportinguista: Chini entró por Vanesa Santana. Y como pasó en el arranque del partido, la primera aproximación fue del Sporting, en una excelente acción de ataque entre Hannah Keane y Fatou Kanteh.
Pero como también ocurrió antes, poco tardó el Granadilla en exigir a Dolan. Primero con un disparo de Martín-Prieto, que detuvo sin mayores problemas, y luego en un centro de Pisco, en el que también estuvo atenta.
Mucho mejor fue su gran parada a Martín-Prieto en un disparo de la sevillana que buscaba la escuadra. Luego llegó, en esos momentos de agobio de las canarias, el centro de Pisco que se estrelló en el larguero, y poco después otro tiro de Martín-Prieto, con respuesta adecuada de Dolan.
Pasado el primer cuarto de hora el Sporting dejó a un lado el manual de supervivencia y se dejó ver por el área canaria. Fue en un centro de Amanda Edgren, al que no llegó Hannah Keane, y sí Noelia Ramos que detuvo.
La réplica tinerfeña fueron dos acciones de cierto peligro, un cabezazo de Patri Gavira que paró Dolan, y un error -el único de todo el partido- de la meta norteamericana, a la que se le escurrió el balón tras un centro de Nasello. Que Emily Dolan estaba inspirada quedó patente en el córner posterior, que repelió con acierto.
Pero lo mejor estaba por llegar. Fue a los 73 minutos cuando una falta lanzada por Cinta Rodríguez desde la medular onubense la cabeceó de espalda, pero con enorme intención Patri Ojeda, sorprendiendo a Noelia Ramos. Gol. El Sporting ya estaba donde quería.
Pero le quedaba resistir el acoso final del Granadilla, que también hay que decirlo, fue menos intenso de lo que se temía. Y es que el gol dio en plena línea de flotación del equipo canario, que por supuesto que lo intentó, pero que se encontró con un Sporting tremendamente ordenado. Un disparo desviado de Gisela Robledo y un remate de Ange Koko -dos de las incorporaciones del Granadilla en el segundo tiempo- hicieron trabajar a Dolan.
Claro que en el tramo finalmente quien también tuvo que emplearse a fondo fue la portera canaria, que hizo una gran parada tras un disparo de Castelló después de una gran contra onubense.
Un lanzamiento muy alto de Nasello, ya en el tiempo añadido, fue la última ocasión que dispuso el conjunto tinerfeño, que vio como el Sporting incluso pudo incrementar su renta con un remate intencionado de Hannah Keane que salió fuera.
Aunque María Eugenia Gil dio un minuto más de alargue -fueron al final cinco- ni siquiera pasó por apuros el marco de un Sporting que, cuando la gallega decretó el final, explotó de júbilo por acceder a su segunda final de la Copa de la Reina en su historia.
UD GRANADILLA: Noelia Ramos; María Estella, Cristina Cubedo (Giovaninha, 88′), Patri Gavira, Pisco; Natalia Ramos; Nasello, Claire Falknor, Sandra Hernández (Gisela Robledo, 80′), María José (Ange Koko, 69′); Martín-Prieto.
SPORTING: Emily Dolan; Ana Carol (Pau, 42′) (Paula Romero, 86′), Cinta Rodríguez, Patri Ojeda, Kristina Fisher, Sandra Castelló, Vanesa Santana (Chini, desc.), Fatou Kanteh, Edgren, Hannah Keane, Anita Marcos.
Árbitra: María Eugenia Gil Soriano (colegio gallego). Mostró la cartulina amarilla a Martín-Prieto (45′), por el Granadilla.
Gol: 0-1 (73′) Patri Ojeda tras cabecear de manera espléndida una falta botada al área por Cinta Rodríguez.
Incidencias: Primera semifinal de la Copa de la Reina disputada en el estadio municipal de Santo Domingo de Alcorcón (Madrid).