Redacción. La Hermandad de Emigrantes comenzó sus obras el pasado mes de agosto. La junta de gobierno, presidida por José Francisco Garrido Cruzado, junto con un grupo de hermanos que se ha sumado a los trabajos de los últimos meses para tener todo a punto para este día tan anhelado han estado poniendo los fines de semana su granito de arena para que todo estuviera a punto en este histórico 19 de marzo, día de San José.
Con esta segunda fase la hermandad sumará a sus instalaciones actuales en la planta baja: un bar-restaurante de 300 m2, almacén y aseos, almacén de sonido e iluminación, patio, escenario exterior y camerino; en la planta sótano: un almacén y tienda de recuerdos; en la planta superior: sala de ensayo de baile, sala multifuncional para talleres, sala multifuncional polivalente, archivo histórico y documental, aseos, salón de actos con capacidad para 180 personas y almacén. En el ala antigua la hermandad dispone en la planta baja: de capilla, sacristía, mayordomía y sala de enseres y camaristas y aseos; la planta superior: despacho presidencia, sala de junta, sala de hermanos y coro.
El presidente de Emigrantes considera que “el próximo sábado será el día de la recompensa al trabajo desarrollado en los últimos 20 años por todos sus predecesores, así como de sus juntas de gobierno y de todos los hermanos que verán cumplido el sueño de ver terminada su casa de hermandad”.