S. D. Los dos equipos de Huelva que militan en el grupo 17 de la Tercera División de fútbol sala tienen este sábado citas a domicilio en la cuarta jornada de la segunda fase de la competición, en la lucha por el ascenso en el caso del Smurfit Kappa, y en la pelea por la permanencia en el del CD Villalba FS.
El primero en comparecer será el cuadro palmerino del Smurfit Kappa, que a las 16:30 se mide al Águila Pedrera en el Pabellón Municipal de Pedrera (Sevilla). Los condales llegan a este partido necesitados de puntuar después de sufrir tres derrotas en esta segunda fase.
En la actualidad el equipo de Jorge Guerra es cuarto en la tabla con 32 puntos, tres por encima del quinto que es el Benalup, su principal amenaza para acabar entre los cuatro primeros, puestos que dan derecho a seguir optando al ascenso.
Le espera un Águila de Pedrera, sexto con 27 puntos, y que lleva una trayectoria curiosa en la segunda fase, ya que ha ganado los dos partidos como visitante, y en cambio perdió el único que jugó al amparo de su gente.
Para las 18:30 está fijado el partido Boca Priego-CD Villalba FS en el Pabellón Deportes ‘Rafa López’ de Priego (Córdoba), éste del grupo por la Permanencia. Seguir sumando es el reto de los villalberos que lideran el grupo en solitario después de su importante victoria del lunes en casa ante el Puntos Suspensivos, duelo que se aplazó en la primera jornada.
Con ese triunfo el CD Villalba firma un pleno en esta fase encabezando el grupo con 27 puntos, dando pasos para asegurar su continuidad en Tercera División. De hecha la permanencia ya la tendría asegurada si no descendiera más de un equipo de Segunda B. El problema es que se corre el riesgo que sean 2 ó 3, y entonces la permanencia estaría a seis o cinco puntos, respectivamente.
Con todo los villalberos confían en prolongar su buen momento en este duelo ante el Boca Priego, 5º con 14 puntos, a 7 de la cuarta plaza. En realidad el cuadro cordobés está prácticamente condenado al descenso, de ahí que este sábado sólo le valga ganar para alimentar un poco la posibilidad de la permanencia, lo que de conseguirla sería poco menos que un milagro.