Redacción. Familiares, compañeros y amigos han tributado un homenaje póstumo a Ignacio Palacios Esteban, delegado episcopal para el Apostolado del Mar en Huelva e impulsor de la Escuela de Formación Profesional Náutico-Pesquera. El acto se celebró a bordo de un barco, que hizo la travesía desde el Puerto de Huelva hasta Punta Umbría.
El homenaje a Ignacio Palacios, fallecido hace ahora un año, quería ser el reconocimiento a quien dedicó su vida a la lucha por la mejora de las condiciones laborales de la gente del mar. La familia de Palacios, representada por su hija, Andrea, y sus hermanos Antonio y Carmelo, había realizado la convocatoria. Fueron invitados amigos y colaboradores a este emotivo acto que respondía a su propia voluntad. Gente relacionada con el mar y los pueblos costeros de Huelva.
Estrechos colaboradores, particularmente José López Boza, y también Francisco Cruz o José Mora Galiana, tomaron la palabra mientras el barco navegaba por la ría onubense. Así mismo habló Enrique Nárdiz, ex-alcalde de Isla Cristina, con quién el delegado episcopal del Apostolado del Mar había tenido especial relación. José López Boza habló de los años de formación en Comillas, la llegada a Huelva de Ignacio Palacios y los primeros pasos en el Apostolado del Mar onubense.
Entre los asistentes se encontraban la alcaldesa de Punta Umbría, Aurora Aguedo, y la diputada nacional y secretaria de Pesca del PSOE, María Luisa Faneca. También embarcaron el antiguo secretario general del PSOE en Huelva, Carlos Navarrete y Juan José García del Hoyo, catedrático de la Universidad de Huelva. Otros amigos del homenajeado así mismo estuvieron presentes, como el pintor Juan Manuel Seisdedos, Enrique Pérez Viguera y Ramón Fernández, hijo de quien, junto a Rafael Zalvide, llevó a la práctica como profesor el inicio y desarrollo de la Escuela Náutico Pesquera de Huelva impulsada por Ignacio Palacios.
Además de las palabras, abiertas por Antonio Palacios, hermano del homenajeado, se dio lecturas a varias cartas de quienes no pudieron estar presente físicamente pero si de corazón. Entre ellos el presidente de la Xunta de Galicia Fernando González Lage y el presidente de la Federación Andaluza de Cofradías de Pescadores, Jorge Campos, y el alcalde de Isla Cristina, Jenaro Orta. Los escritos de estos referentes abundaban en la profunda admiración hacía el homenajeado, tanto como persona como luchador por los derechos de los trabajadores del mar.
Las distintas intervenciones recordaron momentos de la vida de Ignacio Palacios, resaltando sus valores humanos y su capacidad profesional. Humano, coherente, solidario, creativo y con una energía contagiosa, ha dejado una huella imborrable.
En este sentido un representante de la Dirección General de Pesca de la Junta de Andalucía expresó el singular liderazgo de Palacios. Inagotable y afectuoso, firme y amigo. Se puso de manifiesto la enorme influencia que tuvo en el sector pesquero onubense, andaluz y español, de los que poseía un profundo conocimiento.
Al final del trayecto se visionó un video por voluntad del ex-sacerdote. El propio Ignacio, en la proximidad de su fallecimiento, en vida quiso despedirse de sus amigos y familiares. Grabó unas imágenes en las que expresó su agradecimiento por lo vivido y la satisfacción por lo realizado, despidiéndose con cariño de sus allegados.
Ignacio Palacios nació en Burgos y creció en Santander. Tras ordenarse sacerdote pidió su traslado a Huelva. Donde comenzó a trabajar con los pescadores, luchando incansablemente por sus derechos en los años 70 y primeros 80.
Como director del centro de acogida Stella Maris, acogió muchas reuniones secretas de sindicatos y partidos en la clandestinidad. E impulsó la creación de la Escuela Naútico Pesquera, algo que vio imprescindible para mejorar las condiciones y la seguridad de los pescadores. Esta necesidad se hizo más patente porque cuando llegó a Huelva Palacios se estaba produciendo la expansión de la flota pesquera onubense, tanto en caladeros como en dimensión de los buques.
Realizó numerosos viajes en alta mar para para comprobar las condiciones de vida de los marineros. Creó las primeras escuelas infantiles para las familias de los pescadores, y promovió la campaña “Menos horas de mar, más horas de hogar” para reivindicar la conciliación.
Posteriormente el sacerdocio y pasó a la Junta de Andalucía. Allí siguió trabajando para la gente del mar como director técnico del Plan de Modernización del Sector Pesquero, hasta su jubilación en 2005. Su influencia en las políticas pesqueras de la Comunidad Andaluza fue determinante.
Los procesos de renovación de la flota y racionalización de la actividad tienen origen en las ideas de Ignacio Palacios. Tiene publicados numerosos libros, entre ellos “Naufragios en la flota pesquera de Huelva”, con relatos de 28 accidentes con un total de 180 muertos.
El acto de homenaje a Ignacio Palacios fue muy emotivo y la familia representada por dos hermanos y su hija expresó su profundo agradecimiento por la presencia de tantos amigos. Andrea nos manifestó la paz que sentía por haber podido cumplir la voluntad de su padre.