Redacción. Minas de Aguas Teñidas, MATSA, ha hecho pública su Memoria de Sostenibilidad 2020, un documento en el que mide y analiza el impacto económico, social y ambiental de la operación minera en su entorno, en línea con su compromiso con una minería responsable, sostenible, basada en prácticas comerciales éticas y seguras y ambientalmente respetuosas.
La memoria, correspondiente al ejercicio octubre 2019-septiembre 2020, muestra cómo su actividad promueve el desarrollo a través de los recursos minerales, al tiempo que hace un recorrido por los principales hitos y desafíos enfrentados en el período al que hace alusión el documento. Esta se encuentra ya disponible en la web de la compañía: www.matsamining.com.
Estructurada en cinco bloques principales, esta nueva edición de la memoria recoge, entre otros puntos destacados, la continua inversión en exploración que lleva a cabo la compañía, con el objetivo puesto en el descubrimiento de nuevos yacimientos mineros, o la consolidación de su equipo humano y modelo de negocio, que han permitido una extracción segura y una producción sostenible de concentrado de mineral. Todos estos factores hacen posible que MATSA siga a la cabeza del sector minero en la región, configurándose como motor de empleo estable y de calidad y manteniéndose entre las principales empresas onubenses por volumen de facturación y de exportación.
MATSA cerró 2019 con un balance positivo y con perspectivas de crecimiento en los siguientes meses, aunque la crisis global provocada por el COVID-19 y sus consecuencias sobre el mercado, unidas a los días en los que la operación estuvo parada por la presencia de un incendio en su entorno próximo, tuvieron un importante impacto en las previsiones de la compañía.
No obstante, con una inversión acumulada que asciende ya a 1.590 millones de euros, siendo las áreas de planta y mina las que disfrutaron de una mayor dotación económica, MATSA consolida año tras año este proyecto minero de referencia en Andalucía.
Los concentrados de mineral que MATSA produce son enviados, a través del puerto de Huelva, hasta su destino final, siendo sus mercados mayoritarios China y Europa, en sectores universales como el farmacéutico, alimentación y comunicación. Son comercializados por Trafigura, una de las principales compañías comercializadoras de materias primas del mundo y uno de los accionistas de MATSA.
En relación al desempeño económico de la compañía, la Directora General de MATSA, Audra Walsh, ha expresado que: «aunque la incidencia del COVID-19 se ha hecho patente en cada rincón del planeta, dentro de los sectores productivos afectados por sus numerosas implicaciones, la minería ha gozado del privilegio de ser declarada esencial en los inicios de la pandemia, lo que nos ha permitido trabajar de forma continua durante casi todo el 2020, invirtiendo grandes esfuerzos y recursos en conseguir un entorno de trabajo seguro y saludable. Tenemos grandes retos de futuro, entre ellos, reforzar nuestra contribución a un mundo y una minería más sostenible, comprometiéndonos siempre con la seguridad como prioridad y con la mejora continua, con el fin de consolidarnos como una compañía minera moderna, sostenible y con clara vocación de permanencia».
Seguridad e innovación, dos grandes prioridades para MATSA
Una de las prioridades constantes de la compañía es garantizar la seguridad y la salud de todas las personas que operan en sus instalaciones. Su desempeño en esta área en 2020 tuvo, sin embargo, importantes claros y oscuros, ya que sufrió dos tristes pérdidas humanas que le llevaron a realizar una profunda revisión de sus prácticas y comportamientos en esta materia, con un objetivo único: Cero Accidentes, dando así cumplimiento a su principal valor corporativo: La vida es lo más importante.
Entre las medidas implantadas, reforzó el conocimiento de todo el personal en torno a las llamadas Disposiciones internas de Seguridad; puso en marcha la campaña Detente, Piensa, PIENSA, Actúa (DPPA) para empoderar a todos los trabajadores en la toma de decisiones sobre continuar o parar un acto o situación insegura; formó a la primera promoción de Cascos Azules de Seguridad, con la participación de empresas colaboradoras; y siguió implementando o reforzando herramientas para hacer efectiva la seguridad en cada área de trabajo.
Además de lo anterior, emprendió tres novedosos proyectos para construir una nueva cultura de la seguridad, que sitúan a las personas en el centro de la acción: motivando a la adquisición de buenas prácticas en seguridad y calidad de todos los procesos; ofreciendo soluciones innovadoras que generan un cambio psicológico y de mentalidad e impulsan un liderazgo efectivo de los propios trabajadores en esta materia; y promoviendo formaciones, metodologías y herramientas que permitan cambiar hábitos en la forma de trabajar.
Por otro lado, la apuesta por la innovación sitúa a MATSA como una de las mineras más tecnológicas, eficientes e inteligentes del mundo. En 2019 la compañía fue pionera en transformación digital en la minería, inaugurando su nuevo Centro de Control de operaciones y habilitando dos salas teleremote para controlar desde superficie nueve palas y cinco simbas, mejorando la seguridad de los trabajadores y aumentando la productividad, pues permiten operar durante más tiempo al eliminar los tiempos de bajada y subida a mina. En 2020 se completó la instalación de 60 km. de red wifi en interior de mina, que hizo posible, entre otros, el disparo remoto para voladuras y el inicio de la implementación del sistema de Voz sobre IP, que tendrá también un importante impacto en seguridad y productividad.
Otra novedad importante en el pasado año fue el refuerzo de la actividad investigadora para la búsqueda de nuevos recursos. Así, la compañía trabajó en permisos ubicados en los términos municipales de Almonaster la Real, Aracena, Campofrío, El Campillo, Valverde del Camino, Niebla y Mina Concepción, y, en Portugal, inició los trabajos de exploración en la zona del Alentejo. Además, realizó sondeos en el interior de las minas ya explotadas para sacar su máximo rendimiento.
En cuanto al desempeño ambiental, la actividad de MATSA está alineada con los fundamentos de la economía circular, que plantea alternativas para crecer y competir reduciendo la dependencia del uso de materias primas. Así, MATSA continuó en 2020 con sus esfuerzos de optimización del proceso productivo, lo que conlleva el control de los consumos de recursos que son utilizados tanto en la extracción de mineral en mina como en el proceso de concentrado en su planta industrial. Entre otros proyectos, sigue potenciando la recirculación de aguas y la minimización del consumo de agua fresca en las diferentes etapas del proceso, disminuyendo con ello su consumo.
Como parte del compromiso de MATSA con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), la compañía es uno de los principales motores de empleo de la provincia de Huelva, creando trabajo estable y de calidad y apostando por el crecimiento y el desarrollo del talento de su equipo humano. La compañía genera más de 4.000 empleos directos, indirectos e inducidos, con una plantilla de 754 personas, siendo el 80% de las localidades onubenses más cercanas al proyecto, contando el 90% con contratos indefinidos y siendo un 20% empleo femenino. Ha extendido al territorio en el que opera su apuesta por la formación, concluyendo con éxito un curso de Camión y Pala para desempleados del entorno, generando nuevas oportunidades de empleabilidad, y haciendo posible que 260 jóvenes realicen prácticas en sus instalaciones en los últimos 3 años.
Junto con el empleo, otro de los puntos clave de MATSA es el apoyo y colaboración con los municipios cercanos al proyecto, desarrollando durante el año distintos programas para fomentar el bienestar de las personas. Asimismo, generó en 2020 unos 190 millones de euros en la provincia de Huelva entre el pago a proveedores locales, tasas e impuestos y salarios. De este modo, desarrolla desde una perspectiva de sostenibilidad la misión, visión y valores de la compañía.