Redacción. El Consejo de Gobierno aprobó la declaración institucional con motivo del
Día Internacional de la Mujer, que se conmemora hoy 8 de marzo. En el texto se hace referencia al impacto que la pandemia de Covid-19 ha tenido en la sociedad y se expresa el “reconocimiento a la labor desempeñada (por las mujeres) en la lucha contra las consecuencias sanitarias, sociales y económicas de la pandemia”.
En este sentido, se subraya que “en esta crisis hemos aprendido a valorar aspectos esenciales para nuestra vida, y que de forma reiterada hemos obviado e invisibilizado, por ser trabajos en los que mayoritariamente están las mujeres. Es quizás ésta la única lectura positiva que hemos obtenido de estos meses, en los que los empleos relacionados con el cuidado de menores y personas dependientes, la enseñanza, la educación y la sanidad al fin ha visto reconocida una relevancia muchas veces ocultada”.
El Gobierno andaluz recuerda también que “las mujeres han visto cómo se daban pasos atrás en las conquistas realizadas. El confinamiento y el auge de las nuevas formas de trabajo han tenido especial incidencia en esta situación. Así, la cifra de andaluzas que han pedido teletrabajar para compaginar su labor con el cuidado de las hijas e hijos o los familiares mayores o dependientes ha sido mucho mayor que la de los hombres. Lo mismo ha ocurrido con la contratación a tiempo parcial, que duplica en el caso de las mujeres la que se registra para los hombres”.
A este respecto, se apuesta por defender los derechos de las andaluzas a través de dos vías prioritarias: la coeducación y la corresponsabilidad. “El movimiento y las asociaciones en defensa de la mujer en Andalucía nos han enseñado que la herramienta más poderosa para transformar el mundo es educar en igualdad a nuestras niñas y nuestros niños, para que crezcan libres de estereotipos y prejuicios, sin violencia e interiorizando los valores humanos del respeto, la convivencia, la libertad y la igualdad”, recoge el documento. Al mismo tiempo se enfatiza que “hemos de ser capaces de acabar con la silente condena que sufren las mujeres para hacerse cargo de las tareas del hogar, el cuidado de los niños y las niñas y de las personas mayores y dependientes. Una sociedad democrática, que vive y practica los valores de la igualdad y la solidaridad, no puede naturalizar comportamientos discriminatorios y anclados en el pasado”.
La declaración institucional concluye con el compromiso de la Junta de Andalucía para seguir dando pasos adelante en favor de los derechos de las andaluzas para lograr una Andalucía más igualitaria y libre de violencias machistas.
Texto íntegro de la declaración institucional con motivo del Día
Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres:
“La conmemoración del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, está este año marcada indudablemente por el impacto que la pandemia de Covid-19 ha tenido en nuestras vidas. La dureza con la que el coronavirus viene marcando nuestro día a día desde hace justo un año ha supuesto un cambio considerable en nuestro modo de entender la vida, a la par que ha significado un retroceso en los derechos de las mujeres que tanto nos ha costado conquistar. El Gobierno de la Junta de Andalucía quiere, en primer lugar, su solidaridad y pésame por todas las mujeres que han perdido la vida víctimas del virus y, del mismo modo, expresar su reconocimiento a la labor desempeñada en la lucha contra las consecuencias sanitarias, sociales y económicas de la pandemia.
En esta crisis hemos aprendido a valorar aspectos esenciales para nuestra vida, y que de forma reiterada hemos obviado e invisibilizado, por ser trabajos donde mayoritariamente están las mujeres. Es quizás ésta la única lectura positiva que hemos obtenido de estos meses, en los que los empleos relacionados con el cuidado de menores y personas dependientes, la enseñanza, la educación y la sanidad al fin ha visto reconocida una
relevancia muchas veces ocultada.
Sin embargo, es una realidad también que las mujeres han visto cómo se daban pasos atrás en las conquistas realizadas. El confinamiento y el auge de las nuevas formas de trabajo han tenido especial incidencia en esta situación. Así, la cifra de andaluzas que han pedido teletrabajar para compaginar su labor con el cuidado de las hijas e hijos o los familiares mayores o dependientes ha sido mucho mayor que la de los hombres. Lo mismo ha ocurrido con la contratación a tiempo parcial, que duplica en el caso de las mujeres la que se registra para los hombres.
Nos encontramos en un momento clave en nuestra historia y es ahora cuando la unidad, el compromiso y la coherencia tienen que ser las premisas fundamentales para seguir garantizando y velando por los Derechos Humanos. Especialmente los de todas las mujeres que día a día, y de forma agravada por la progresión de una crisis sanitaria, social y económica, siguen encontrando barreras sociales, brechas de género, discriminaciones en todos los ámbitos de la vida y siguen atrapadas entre techos de cristal y barreras que dificultan el pleno desarrollo en libertad y con dignidad.
Y en esa defensa de los derechos de las andaluzas debemos trabajar en dos vías prioritarias: la coeducación y la corresponsabilidad. El movimiento y las asociaciones en defensa de la mujer en Andalucía nos han enseñado que la herramienta más poderosa para transformar el mundo es educar en igualdad a nuestras niñas y nuestros niños, para que crezcan libres de estereotipos y prejuicios, sin violencia e interiorizando los valores humanos del respeto, la convivencia, la libertad y la igualdad.
Del mismo modo, es necesario inculcar en la sociedad el convencimiento de la obligatoriedad en avanzar en la corresponsabilidad. Hemos de ser capaces de acabar con la silente condena que sufren las mujeres para hacerse cargo de las tareas del hogar, el cuidado de los niños y niñas y de las personas mayores y dependientes. Una sociedad democrática, que vive y practica los valores de la igualdad y la solidaridad, no puede naturalizar comportamientos discriminatorios y anclados en el pasado.
Este Gobierno quiere construir puentes para conseguir avanzar en la igualdad real de mujeres y hombres desde el diálogo y el consenso. En una situación donde las brechas de género se acentúan y donde las situaciones más injustas de nuestra democracia tienen rostro de mujer, es nuestra responsabilidad trabajar por su defensa sin caer en la tentación de convertir la lucha por sus derechos en un enfrentamiento político ni ideológico. Este 8 de marzo la pandemia nos impedirá llenar las calles de mujeres y hombres andaluces reclamando igualdad, pero no frenará nuestra clara determinación por hacer de Andalucía una tierra más justa. Expresamos nuestro firme compromiso para seguir dando pasos adelante en favor de los derechos de las andaluzas para lograr una Andalucía más igualitaria y libre de violencias machistas”.
