Redacción. La responsable de proyectos de la Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva, Pilar Cendrero, se reunió en la tarde de ayer con Julia Barahona, técnica del área de cooperación internacional de la Diputación Provincial de Huelva, y con Rafael Santana, representante de la asociación Santa Marta de ayuda a la infancia de Puerto Maldonado (Perú), para hacer el seguimiento de la situación del proyecto de cooperación internacional en el que colaboran las tres entidades. Con este proyecto se ayuda a mejorar las condiciones de vida de menores en situación de abandono que viven en la casa-hogar “Ana Almendro”.
Entre otros temas, se habló de la situación que se está viviendo en Puerto Maldonado a causa de la pandemia de Covid-19. La provincia de Tambopata, en la que se encuentra la casa de acogida, es una de las más afectadas del país, por lo que se encuentra confinada tanto al exterior como interiormente. Además, se han suspendido las clases presenciales en todos los niveles educativos para todo el curso 2020-2021. Por este motivo, se ha estudiado la posibilidad de modificar partidas presupuestarias para adaptarlas a la situación actual. Una de las propuestas es destinar el presupuesto reservado para uniformes, transporte y material escolar a otras necesidades más urgentes derivadas de la situación de emergencia.
Asimismo, el programa de voluntariado internacional que financia la Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva se ha visto suspendido, por lo que se está estudiando la posibilidad de adaptarlo a una modalidad online. Por ejemplo, en la actualidad, no disponen en la casa de acogida de un servicio de atención psicológica, tan necesario para los/as menores que allí conviven, y se podría ofrecer de forma telemática.
La Mancomunidad de Desarrollo Condado de Huelva colabora desde el año 2018 con este proyecto que ayuda a mejorar las condiciones de vida de niños y niñas y adolescentes de 0 a 18 años que se encuentran en proceso de investigación tutelar por sufrir presuntamente situaciones de violencia física sexual, orfandad y/o abandono. Concretamente, la colaboración de la Mancomunidad permite la contratación de mano de obra y compra de materiales para acometer algunas mejoras en esta Casa-Hogar, una ayuda fundamental para pagar los sueldos del personal trabajador interno y cubrir el coste de funcionamiento de las casas (material escolar, ropa y calzado de vestir, manutención, transporte escolar, asistencia médica y pediátrica, apoyo psicológico…).
Además de esta colaboración, la Mancomunidad realiza actividades de sensibilización y, el pasado año, puso en marcha el programa de voluntariado internacional que permite que personas solidarias, prioritariamente del Condado de Huelva, tengan la oportunidad de trabajar como cooperantes en las casas de acogida de Puerto Maldonado.