Redacción. Mientras el sector de la fresa y los frutos rojos de la provincia de Huelva no para de trabajar para garantizar el abastecimiento y remontar los efectos que la crisis del coronavirus ha tenido sobre sus principales mercados, las empresas productoras y comercializadoras también tienen tiempo y energía para continuar con la obra solidaria que se proyectó en el seno de Interfresa desde que comenzó el Estado de Alarma.
Esta semana, los hospitales gaditanos como el de Jerez han sido los receptores de las fresas de primera calidad donadas por Grufesa. El jueves por la tarde, gracias a la colaboración que Interfresa y la Consejería de Salud mantienen para dar soporte a esta acción, un camión de Mediterránea, empresa responsable de los servicios de restauración en los centros beneficiarios de la iniciativa, se trasladó hasta la sede de Grufesa para recoger más de 500 kilos de fresas que a las pocas horas ya disfrutaban tanto los pacientes como los sanitarios de varios centros hospitalarios.
Por otro lado, el viernes, Interfresa y la Fundación Caja Rural del Sur llevaron hasta la capital vecina, Sevilla, unos 300 kilos de fresas donadas por Cuna de Platero, destinadas a comedores sociales y residencias de ancianos como los que gestionan las comunidades de Santa Rosalía o las Hijas de la Caridad, así como a los menús familiares que entidades como la Hermandad de la Cena distribuyen a diario entre aquellas personas que lo necesitan.
Todos ellos agradecieron muy sinceramente la ayuda recibida por Interfresa, la Fundación Caja Rural del Sur y Cuna de Platero, cuyas fresas, según explicaron las religiosas a Pedro Marín, gerente de la interprofesional, son las primeras que han probado en su vida algunos de los beneficiarios de estos centros.