Antonio José Martínez Navarro. Algo debió ocurrir, cuando en abril de 1868 el padre de este contratista escribía, en la lengua de Moliere, al Ilustre Ayuntamiento de Huelva en los términos siguientes:
<<Paris. Le 30 de Avril de 1868 a Monsieur le marsé de Huelva. Je viens parce bien le plûtot prossible avoir la complaisance de me faire savoir des neuvelles de mon fils, Jules Philipp voici plus de 6 mois que je suis attendre une repoute des diversas letres…>>.
Esto es, su padre, ingeniero constructor, le escribía desde París extrañándose que en los últimos seis meses no le hubiera contestado.
Huelva iba tomando una cierta importancia en la industria minera. Por ese motivo, de vez en cuando llegaban a su Ilustre Ayuntamiento folletos de entidades deseosas de prestar sus servicios. Así, en el Legajo, número 234 del A.M. H. aparece un escrito enviado por Amado Pigeón, con razón social en el Boulevard del Prince Eugene, 141, de París, entidad que había obtenido Medaille d’Argent (Medalla de Plata) en Bayona, 1864, en la Exposición Franco-Española. En esta oportunidad, vamos a extraer unas líneas de la extensa carta que decía así:
<<Muy Sr. mío: Tengo el honor de poner en conocimiento de Vd. que acaba de suprimir el Depósito de Máquinas, Aparatos, etc. que yo tenía establecido en Madrid desde 1862…>>.
Después, le daba cuenta de su nueva industria:
<<Desde el año 1862 estoy ocupándome de la construcción, compra a comisión, instalación de máquinas…>>.
El 3 de marzo de 1868, fallece en el Hospital de Caridad un súbdito francés. Lógicamente interviene el vicecónsul de este país en nuestra capital (Legajo, número 234 del A. M. H.):
<<El Vicecónsul francés en esta capital con fecha de hoy me dice lo siguiente; “Por el Sr. Cónsul General de Francia en Andalucía se me reclama la partida de defunción del súbdito francés Lafontan Cirilo, carpintero, de 41 años de edad, nacido en Bezels (Gers), que falleció en el Hospital de Caridad el 3 de marzo de 1868.
En su vista ruego a Vd. se sirva dar las órdenes oportunas para que sea extendido dicho documento y se me remita a los efectos anunciados”.
Lo que traslado a V. S. a fin de que en su vista se sirva remitir el documento que se pide. Manuel García Sánchez…>>.
El 4 de marzo de 1868, salía del Hospital de Caridad de Huelva un preso francés que estaba recluido por orden del Gobernador civil (Legajo, número 234 del A. M. H.):
<<Administración del Hospital civil de Huelva, titulado de Caridad. Con fecha de hoy y por disposición del facultativo don Sebastián Pérez Conde ha sido dado de alta el enfermo preso que se halla en ésta por disposición del Sr. Gobernador civil de esta provincia, Pedro Lagut, de nacionalidad francesa. Lo que comunico a Vd. para los efectos consiguientes. Dios…Huelva, 4 de marzo de 1868. El Administrador del Hospital, Francisco de la Corte Silvera…>>.
En los primeros instantes de julio de 1871, dos franceses llevaban dos borregos, sin abonar el correspondiente consumo, a un barco de la misma nacionalidad surto en la ría de Huelva. Los del citado arbitrio intervinieron y aprehendieron los citados animales. Ante tal situación el vicecónsul dio parte al Alcalde de Huelva en los términos siguientes (Legajo, número 237 del A. M. H.):
<<Vicecónsul francés. En 3 de julio de 1871. Adjunto remito a Vd. copia certificada de la procedencia en el expediente instruido al efecto recaída sobre los dos carneros aprendidos a los dos súbditos franceses. Dios…>>.
El alcalde le remitía el siguiente oficio al Gobernador civil:
<<Al Gobernador civil de esta provincia. En 25 de julio de 1871. En vista de la comunicación de V. S. de 20 del actual, se adjunta el expediente instruido sobe la redención de dos carneros a dos súbditos franceses. Suplicando su devolución cumplido que sea el objeto de la reclamación. Dios…>>.
Y éste, en igual fecha, le enviaba el siguiente escrito al Alcalde de la capital:
<<Habiéndose reunido en queja a este Gobierno de provincia el señor vicecónsul de Francia, manifestando que por esa Alcaldía se ha dictado providencia de comiso de dos borregos que dos súbditos franceses llevaban a un buque de su nación, espero se servirá Vd. remitir a este gobierno el expediente que para el efecto se haya instruido pro V. S. Dios…Huelva, 20 de julio de 1871. El G. A…>>.
En la sesión municipal del 24 de septiembre de 1874 se recibía varios ejemplares en idioma de Moliere:
<<…Se dio cuenta de una comunicación del Sr. Gobernador Civil de la Provincia acompañando cinco ejemplares impresos en idioma francés del Catálogo publicado por la Comisión española que representó a esta nación en la Exposición General de Viena para que se repartan entre los individuos de este Ayuntamiento el cual acordó distribuir cuatro ejemplares, archivar uno y dar las gracias al Sr. Gobernador y acusarle el recibo…>>.
El prestigio de los licores y vinos franceses a lo largo del siglo XIX y XX fue muy alto. Así, en el diario “La Provincia” del miércoles, 22 de diciembre de 1875 queda patente este aserto:
<<En el establecimiento La Cita, Concepción 17, se acaban de recibir un variado y abundante surtido, de los puntos productores, para Pascuas: Champagne Minet Jeune Reims, superior. Ídem Creme de Bouzy, también en medias botellas. Vinos de Burdeos en varias clases: licores franceses exquisitos de primera: Coñac, fine Champagne, Coñac Old Brandy.
Lícores ingleses: Cognac Martell, idem Huvet ; Whisky, Old Tom Gyn; Ginebra de Holande.
Licores del Reino de varias clases: vinos generosos; Manzanilla de Sanlúcar superior y salchichones>>.
Cuando Argelia era una colonia francesa, se incoa un expediente jurídico y como un matrimonio participaba en la sumaria se le pide al Ayuntamiento de Huelva que facilite la dirección de los esposos (Legajo, número 254):
<<Viceconsulat de France en Huelva. El Excmo. Sr. Ministro de Negocios extrangeros (¡) de Francia me ha hecho remitir dos actas judiciales, procedentes del Tribunal de Oran y de mucho interés para entregarlos a los esposos Antonio Martín y Teresa Vázquez. Como ignoro el paradero de este matrimonio, le suplico me facilite dicho dato para remisión de dichos documentos. Dios… Huelva, 23 de agosto de 1882. Viceconsulat de France. A. de Tellechea…>>.
No siempre el cónsul “apostaba su mano en el fuego como el romano Scévola”. Así, en abril de 1884 no se responsabilizaba de un francés que se emborrachaba, insultaba y pedía a destemplanza a los onubenses (Legajo, número 257):
<<Ilmo. Sr. Gobernador civil de la provincia. 26 de abril de 1884. Observase con frecuencia que algunos extrangeros (¡) se presentan en esta localidad y fingiendo acontecimientos desgraciados, imploran la caridad pública, de una manera inconveniente.
Los agentes de mi autoridad tienen las debidas instrucciones para no permitir dichos abusos. Ayer se encontraba en las calles de la ciudad un extrangero (¡), completamente ebrio, faltando a todas las reglas de orden y pidiendo a cuantos transitaban, de un modo grosero.
El cabo de la guardia municipal don Juan Rojas le dio orden para que se retirara en cuyo acto levantó la mano contra el mismo cabo, hecho notado por el soldado que prestaba la guardia en ese gobierno y que impidió que se consumara la agresión.
El extrangero (¡), que se dice ser francés, fue conducido en clase de detenido, a la cárcel pública llevando guardados los indultos adjuntos.
Del hecho he dado cuenta al Sr. cónsul francés en esta capital, quien cree que el detenido debe conceptuarse y ser tratado como indocumentado.
Queda, pues, a disposición de V. S. el detenido, que dice llamarse Cavaviste Felva, para la resolución que de justicia considere. Dios…>>.
En ocasiones, llegaban a Huelva franceses indeseables, como ocurrió en los primeros días del año 1885 (Legajo, número 260):
<<Ayuntamiento Constitucional… Huelva, 2 de febrero de 1885. Constantemente llegan a esta población súbditos franceses que fingiéndose emigrados o náufragos se dedican a recoger limosnas sorprendiendo la más de las veces a las mugeres (¡) y obligándoles con amenaza a que atiendan a sus exigencias.
Ayer se me dio queja por varios vecinos de que dos extranjeros al parecer franceses recorrían las calles de la población fingiéndose náufragos según las targetas (¡) que presentaban para que los socorrieran y si no lo conseguían a pesar de sus amenazas se desvergonzaban con los vecinos y emitían palabras indecorosas y ofensivas en los portales.
La guardia municipal los detuvo. Dijeron llamarse Jules Isamberng, natural de Orán, ascendencia francesa y de 27 años de edad y el otro Auguste Antoine Besits, de Main, provincia de Vaneluse. Al primero se le encontró un certificado de náufrago que dijo haber comprado a un parisién en Lisboa y que le servía para acreditar su persona con la Guardia Civil, como un ciento de targetas (¡) impresas con las que hacer ver ser emigrante y náufrago, una targeta (¡) pequeña con un mapa de España interior que le servía para seguir su ruta, una cartera de viaje rota y quince reales en efectivo que debía haber recogido en dicho día en esta población y el segundo un pase expedido por el vicecónsul de Francia en Granada, una cartilla francesa de pasaporte y como unas cincuenta targetas (¡) impresas como las anteriores y once reales en efectivo.
Estos individuos se encuentran detenidos en la cárcel pública y a disposición de V. S. para la resolución que considere de justicia. Dios…>>.
(Continuará)