El marco de contingencia común diseñado para todo el sistema universitario andaluz establece pautas generales sobre cómo proceder en cuestiones como los mecanismos de evaluación, las prácticas que no se puedan desarrollar de forma no presencial, la adaptación del calendario académico, las guías docentes, el desarrollo de los Trabajos Fin de Grado (TFG) y los Trabajos Fin de Máster (TFM), las defensas de Tesis Doctorales o los aspectos administrativos relacionados con la gestión de actas o seguros obligatorios.
Los cambios introducidos en la docencia y evaluación programada serán adoptados por los órganos de gobierno competentes y comunicados a los estudiantes con la suficiente antelación para el adecuado seguimiento de la docencia, preparación de las pruebas de evaluación y planificación de su tiempo.
Los cambios adoptados ante la situación de excepcionalidad tenderán a mantener los niveles de calidad formativa y tendrán siempre como marco de referencia los Estándares Europeos para el Aseguramiento de la Calidad (ESG-2015). Asimismo, se procurará ofrecer alternativas en las modalidades de docencia y evaluación de manera flexible para atender a aquellos estudiantes que por falta de recursos tecnológicos tengan dificultades para el seguimiento de su formación a distancia, sin detrimento del nivel de exigencia en los resultados del aprendizaje.
Asimismo, es un objetivo del proceso de adaptación que el estudiantado pueda cursar las asignaturas en la que está matriculado y ser evaluado en las fechas previstas en el calendario académico, sin sufrir retrasos en la terminación del presente curso académico o tener que trasladar las asignaturas al próximo curso.