S. D. El gran favorito para lograr la medalla de oro, el francés Benjamin Choquert, revalidó su título de campeón de Europa de Duatlón, al vencer con autoridad la carrera disputada en Punta Umbría, en la que el también galo, el Sub 23, Le Bihan fue medalla de plata, y el británico Alistair Brownlee, bronce, aunque antes que él entró el el canadiense Mislawchuk, que no contaba.
Choquert es un campeón como deportista y como persona. Esperar a Emilio Martín, que fue 12º tras un error en la primera transición, para aplaudirle en la meta, dice mucho de cómo es este francés, coronado de nuevo en Punta Umbría. Su dominio fue insultante. Controló la prueba como quiso, y cuando lo necesitó, se fue por delante ya en el último tramo a pie. Es el actual campeón del mundo, llegó a Punta Umbría también como campeón de Europa, y salió con el cetro de nuevo.
Lo de Emilio Martín fue el cúmulo de la mala suerte. De entrada llegó al Europeo más exigente con ganas de hacerlo muy bien porque era en casa, pero no en las mejores condiciones debido a unos problemas en la espalda que le impidieron entrenarse con normalidad.
Aún así el onubense, multicampeón por algo, se fajó con los mejores en el primer tramo a pie -5 kilómetros-, que se corrieron a un ritmo altísimo y en el que se hizo ya la selección de los favoritos, entre los que estaba Emilio Martín.
Pero fue en la transición a bicicleta donde se decidió que el de Huelva no iba a contar para las medallas. Era cuarto, con serias opciones, pero un error con la zapatilla le dejó materialmente clavado en la meta. Cuando pudo reaccionar ya había perdido al menos 20 segundos con todos los favoritos. Misión casi imposible.
Por si fuera poco, ni el estado de forma de Emilio ni la colaboración que tuvo en el grupo perseguidor para intentar enjugar la diferencia -ninguna- permitieron el milagro. Los 31 segundos de desventaja con los que llegó a la segunda vuelta ya dejaron claro que este no era su Campeonato, y que las medallas se la jugarían otros.
Quiso dar primero el francés Le Berre, que tomó unos metros de ventaja; luego le tocó al británico Buckingham. Y todo esto, con un Benjamin Choquert atento, a distancia prudencial y sabiendo que, en el momento preciso, iba a asestar el golpe definitivo.
Buckingham fue el primero en la segunda transición; nueve segundos detrás estaban Choquert, Le Berre, Le Bihan, Brownlee, Mislawchuk … Emilio ya a 51. La pelea por las medallas entre los galos y los otros ‘gallos’. Y en ese corral manda Choquert, que pronto tomó el mando de las operaciones, aunque inicialmente encontrara fuerte resistencia del canadiense Mislawchuk -que no contaba para las medallas-, aunque al final, en el último arreón del galo éste lo dejó todo visto para sentencia.
Choquert pasó primero por la línea de meta (55:12) y se llevó el oro; segundo fue Le Bihan (52:19), que le ganó la plata en los últimos 25 metros a Brownlee (52:21), bronce, si bien éste entró cuarto pues tercero en la prueba fue el canadiense Mislawchuk (52:20), que no optaba a podio en el Europeo.
El final fue la foto ya mencionada de Choquert aplaudiendo en la meta la llegada de otro campeón, Emilio Martín, aunque en este caso su nombre no estuviera en el medallero ni subiera al podio.