Redacción. La Policía Local de Huelva continúa con la campaña contra la venta ambulante ilegal en la ciudad, reforzando desde principios de año el control sobre productos perecederos por el riesgo para la salud que supone consumir productos que no cumplen las condiciones de higiene y sanidad mínimas. En este sentido, desde el día 10 de enero, con el final de las fiestas navideñas, se han intervenido 1.480 kilos de alimentos de este tipo, en distintos puntos de la capital.
Entre el material confiscado, destacan 1.200 kilos de naranjas o 55 kilos de coquinas; además de 40 kilos de limones, aguacates y fresas; y diferentes cantidades de patatas, perejil, tomates, pimientos, uvas, ciruelas, melocotones, ajos o plátanos. Además, y a pesar del refuerzo en las intervenciones de productos no perecederos, se mantiene la vigilancia general, como demuestra la incautación asimismo de 180 pares zapatillas deportivas y 18 mallas de deporte unisex de distintas marcas.
Como ha señalado el concejal de Movilidad y Seguridad Ciudadana del Ayuntamiento de Huelva, Luis Albillo, “nuestra intención es continuar con estos operativos e inspecciones para combatir la venta ilegal en la ciudad a nivel general, acentuando la vigilancia en los alimentos, por tratarse de productos que no pasan ningún tipo de control sanitario y pueden ocasionar graves problemas de salud pública». De esta forma, Albillo insiste en que “pueden afectar directamente a los ciudadanos, además de al comercio de la ciudad”.
En este sentido, el concejal ha insistido en que evitar la compra callejera favorece la lucha contra el fraude “que supone ejercer una actividad económica sin licencia, ni pago de los correspondientes impuestos que gravan al resto de establecimientos”, recordando que la venta ambulante ilegal, además de conculcar los derechos a la propiedad intelectual e industrial de las empresas falsificadas y comercios legalizados, atentan contra los consumidores y las pymes de Huelva y suponen un riesgo para los usuarios al utilizar componentes no originales, sin control sanitario, una pérdida de la garantía del producto y de la posibilidad de reclamar.
Por ello, Luis Albillo ha hecho un llamamiento a los ciudadanos “para que adquieran todos los productos y especialmente los perecederos en los establecimientos autorizados para ello, que garantizan unas condiciones óptimas para su consumo” insistiendo en que «para extinguir esta actividad, además de seguir apostando por el control, la vigilancia y la prevención, es muy importante la concienciación social en cuanto a evitar comprar alimentos en puestos callejeros”.