S. D. No cesa de hacerse fotografías con aficionados de todas las edades que anhelan tener un recuerdo, en forma de instantánea, con uno de los jugadores más grandes de todos los tiempos del baloncesto español y del basket europeo. Es Juan Carlos Navarro, que tampoco ha querido faltar estos días tan señalados a su cita con el Campeonato de España Infantil y Cadete de Selecciones Autonómicas. Actual secretario técnico de baloncesto formativo del FC Barcelona, sus ojos tienen también una mirada muy especial en el #KDTINF2020 para la selección catalana Cadete femenina, de la que forma parte su hija Lucía.
El mito del basket explicó que el mejor consejo que le da a ella, así como a todos los participantes del campeonato, es “que disfruten todos al máximo, que se lo pasen muy bien, que vivan a tope esta experiencia de estar aquí tras haber sido elegidas entre muchas jugadoras de muchos clubes y que, por supuesto, una vez que ya están en el campeonato tienen que intentar competir al máximo e ir a por todas”.
Navarro consideró que “lo mejor del torneo es ver la ilusión de los chavales y de las chavalas. Han trabajado mucho durante todo el año, han sufrido mucho, ha habido en todos los equipos muchos cortes antes de llegar hasta el final… El ambiente que hay entre todos es buenísimo y, por si fuera poco, podemos estar todo el día viendo baloncesto algo que, para los que nos apasiona este deporte, no tiene precio. Y ahora llega lo mejor, el tramo decisivo con las semifinales y las finales, que van a ser partidos muy bonitos y de los que vamos a disfrutar todos”.
El jugador que más veces se ha enfundado la camiseta de la selección española de baloncesto también quiso destacar “el ambiente que se genera en Huelva en torno al campeonato, porque realmente es extraordinario. Tanto en la capital como en el resto de sedes la atmósfera es muy bonita y, particularmente, me encuentro genial aquí. El trato en todos los sentidos es excepcional en cualquier pabellón y en cualquier sede y de eso se trata, de ver disfrutar a los chavales y a las chavalas, a los familiares, a las aficiones, y vivir el baloncesto disfrutando de estas futuras estrellas”.