J.A. de Mora. La sociedad afortunadamente avanza en muchos planos y en el de la igualdad parece que se produce una evolución irreversible. En un ámbito donde precisamente se hace más patente la desigualdad, la economía agraria, hace pocos años se ha instituido una fórmula con respaldo legal denominada Entidad de Titularidad Compartida.
Y esta modalidad, aún bastante desconocida, tiene como pionera en su divulgación y materialización, dada su condición de asesora, a Rosaura Martín, joven economista y abogada onubense que dirige junto a sus socios la firma de asesores Gapyme, S.A. Rosaura forma parte de la segunda generación de directores de este conocido gabinete provincial e hija de José Martín Camacho, uno de sus fundadores.
Y prueba de este reconocimiento de Rosaura como experta en la materia fue la publicación recientemente de una entrevista en un monográfico sobre la novedosa figura en el boletín mensual del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en el que se le cuestionaba por distintos aspectos de la Titularidad Compartida.
Para Rosaura, ‘incompresiblemente, la ETC es una figura casi desconocida hasta hace relativamente poco tiempo, a pesar de existir desde hace más de 7 años. Durante los primeros años los profesionales nos hemos tenido que enfrentar a continuos obstáculos imputables a las lagunas legales en relación al funcionamiento de las mismas y a la falta de actuación de las Administraciones. Afortunadamente esto está cambiando desde hace un par de años, ya que la implicación de las Administraciones ha dado un giro brutal y hemos pasado de ser entes desamparados a estar completamente respaldados, en nuestro caso, por las Consejerías de Agricultura e Igualdad de Andalucía.
Una de las finalidades de la ETC es promover y favorecer la igualdad real de las mujeres en el medio rural ya que es allí donde se produce una evolución más lenta en la equiparación de sexos, siendo un sector muy “masculinizado” en el que, en España, más del 70% de los titulares de explotaciones son hombres y el trabajo de la mujer no ha tenido reconocimiento jurídico ni económico considerándose simplemente una “Ayuda” familiar.
Entre otras ventajas, las ETC posibilitan bonificaciones en las cotizaciones a la seguridad social. En este sentido, nuestra protagonista opina que ‘sería muy interesante que la reducción del 30% en cotizaciones durante 5 años, e incluso lo comentamos con la Consejería de Agricultura, se ampliara de manera indefinida o al menos durante 10 años, ya que cuando decidimos emprender un negocio agrícola o ganadero, el mismo no comienza a dar frutos hasta el quinto o sexto año, por lo que una vez que la ETC empieza a crecer, la pérdida de esta reducción, desde mi punto de vista y experiencia profesional, es un factor que desincentiva a los comuneros enormemente.’
La Entidad de Titularidad Compartida en la que se ha especializado Rosaura Martín comporta muchas ventajas. Entre otras un posicionamiento preferente a la hora de optar a subvenciones, un derecho también preferente a formación y asesoramiento por parte de las instituciones públicas del ramo, ventajas a la hora de acceder a la condición de ‘explotación prioritaria’, y otras diversas ventajas de naturaleza fiscal.
En este camino en el que la joven economista onubense está a la vanguardia, desarrolla un notable trabajo en la divulgación de este interesante modelo, como el que tuvo lugar hace pocos días en Córdoba, en la sede de la quinta cooperativa agraria más importante de España, Covap, donde impartió una jornada de formación en la materia.
