S. D. Un paso más para confirmar sus progresos. Fue el que dio Carolina Marín, ya en la semifinal del Open de China, uno de los ‘grandes’ del bádminton mundial, después de superar en los cuartos de final a la jugadora local He Bing Jiao (11-21, 21-14 y 21-15), en un partido que duró 58 minutos.
Ocho meses fuera de las pistas por una lesión, operación por medio, desgastan a cualquiera. Lo pudo comprobar la onubense en Vietnam en su regreso a las pistas, en donde sólo pudo jugar un partido al caer en la primera ronda ante la tailandesa Supanida Katethong.
La historia en el Open de China está siendo diferente, para bien de Carolina Marín, que ya evidencia sus progresos superando rondas y llegar, de momento, a las mismas puertas de la final. Lo que venga ya será otra cosa.
Para hacer posible este guión, la de Huelva superó en la primera ronda del torneo a la japonesa Nozomi Okuhara, número 3 del mundo y actual subcampeona mundial; en los octavos de final a la norteamericana de origen chino, Beiwen Zhang. Y ahora en los cuartos, a la jugadora local He Bing Jiao, en un partido en el que, tras caer en el primer set, reaccionó como ella sabe e impuso su ley en los dos siguientes.
El pase a la final se la jugará la onubense el sábado a la japonesa Sayaka Takahashi, a la que vence en los antecendentes por 4-1.