Redacción. El Hospital Infanta Elena ha mantenido durante los pasados meses de julio y agosto una programación quirúrgica muy intensa y una alta tasa de actividad en sus instalaciones, lo que ha permitido aumentar su volumen de intervenciones en más de 60% respecto a la actividad registrada durante el mismo periodo del año pasado. Un esfuerzo muy importante por parte del centro y de sus profesionales, que se mantendrá también durante el mes de septiembre con el fin de agilizar los tiempos de repuesta y mejorar la atención sanitaria para aquellos pacientes que necesitan de una intervención quirúrgica y se encuentran en lista de espera.
El Plan de Vacaciones de este año, el más importante en cuanto al volumen de contrataciones y de recursos en activo de los últimos ejercicios, ha permitido que 627 pacientes hayan sido operados de forma programada durante estos dos meses, lo que supone 386 pacientes más que el verano del año pasado. Las intervenciones corresponden, fundamentalmente, a las especialidades de Traumatología y Cirugía Ortopédica, Oftalmología, Otorrinolaringología, Cirugía General, Urología y Dermatología.
La organización del plan de vacaciones, que ocupa hasta el mes de septiembre, tiene previsto mantener operativos la mayor parte de los quirófanos durante el verano, con 214 sesiones operativas programadas, en las que se podrán intervenir a unos 850 pacientes en total. Además, el Bloque Quirúrgico del Hospital Infanta Elena se encuentra preparado para atender las más de 240 intervenciones de urgencia que, atendiendo a los datos históricos de años anteriores, se espera que puedan registrarse en conjunto durante los tres meses estivales.
Y precisamente para hacer frente a este aumento de actividad respecto a otros años, el centro hospitalario ha aumentado considerablemente su volumen de contrataciones durante estos meses, con un Plan de verano sin precedentes en los últimos ejercicios, en los que se han visto aumentadas en un 24% las jornadas contratadas, beneficiando a todas las categorías profesionales del centro. En este sentido, ha sido la división de enfermería la que registra un mayor volumen de contrataciones. En cuanto a la división médica y a pesar de la escasez de especialistas que se registran a nivel nacional, se han multiplicado por tres el volumen de contrataciones previstas, en relación al año pasado.
A su vez, este aumento considerable de las jornadas de trabajo contratadas, ha permitido mantener abiertas y en pleno funcionamiento todas las alas de hospitalización del centro, disponibles así tanto para hacer frente a los ingresos del verano, como para acoger la demanda de camas asociadas al volumen de actividad quirúrgica que el Hospital está registrando durante el periodo veraniego. Una actividad que ha resultado también muy intensa en el ámbito de las consultas externas y de las pruebas diagnósticas. En este sentido, se han programado también sesiones de tarde dedicadas a determinados estudios de radiodiagnóstico y ecógraficas, así como a la realización de otras pruebas digestivas, respiratorias y urológicas, que han permitido crecer también en actividad, con casi 24.000 pruebas diagnósticas realizadas en apenas dos meses, lo que supone unos 700 estudios más que los realizados en el mismo periodo del año anterior.
El objetivo de todo este esfuerzo de organización y presupuestario ha sido crecer en actividad respecto a otros años, evitando así el descenso de actividad que se produce durante los meses de verano. Para eso en esta ocasión, el Plan se ha diseñado contando con la opinión de los diferentes servicios asistenciales y atendiendo a sus necesidades específicas, además de haberse presentado, por primera vez en el centro hospitalario, a los representantes de los trabajadores, mientras se encontraba en la fase de elaboración para su conocimiento y participación, y no solo para informarles una vez decidido, cerrado y formalizado el mismo.
Además, el centro hospitalario ha aprovechado también estos meses para realizar algunas obras y actuaciones de mejora en las instalaciones del centro con el fin de mejorar la comodidad, la seguridad y la atención a los pacientes. En conjunto, un verano de gran intensidad asistencial que no hubiera sido posible sin el compromiso y el esfuerzo realizado por los profesionales de las distintas divisiones y que está suponiendo un incremento importante de la actividad, que permitirá reducir los tiempos de espera, mejorando así la calidad de la asistencia sanitaria.
