Redacción. La disertación de Santiago, capataz de una familia sevillana, referente del mundo cofrade, versó sobre el pasado, el presente y posibilidades en el futuro del mundo del costal. El acto, organizado por el Casino de Beas reunió a unas cien personas en el Centro de Servicios Sociales,aromatizado con incienso y adornado con motivos propios de la Semana Santa
Antonio Santiago, médico de profesión, y más conocido por la labor que realizó como Capataz Principal de la Hermandad de la Macarena, ofreció una lección de historia sobre el mundo de las procesiones y de los capataces,que abarcó desde le momento en que se tienen noticias de la primera procesión, pasando por los tiempos en que las cuadrillas de costaleros la conformaban personas a sueldo proveniente del mundo de los estibadores del puerto, o jornaleros del campo y de la construcción, hasta llegar a los primeros años de la década de los setenta, en que en Sevilla la Hermandad de los Estudiantes consiguió sacar los primeros pasos con hermanos costaleros.
En la parte final de su conferencia, tanto por su experiencia de mas de cuarenta años, como por su condición de medico, Santiago ofreció a los costaleros beasinos asistentes importantes consejos sobre la forma de confeccionar el costal, tipo de calzado a emplear y cómo estar debajo de las trabajaderas.
En su disertación, en la que en todo momento estuvieron presentes sus sentimientos cristianos y su fe en Jesucristo y en su Madre, Santiago mandó un mensaje inequívoco a los costaleros cuando finalizaba, manifestando que “los costaleros y costaleras deben pensar siempre, mientras procesionan, en ir orgullosos por ser los pies con los que caminan por las calles nuestras imágenes en Semana Santa».