Mari Paz Díaz. Muchas veces se ha querido lanzar el mensaje de que la voluntad de las personas puede más que cualquier impedimento o problema que se pueda producir a la hora de conseguir un sueño. Pero pocas veces un mensaje puede quedar tan claramente demostrado como puede suceder al conocer la experiencia y la pasión de personas como Carlos Sanchís Collado, para el que la discapacidad que tiene desde los 18 años, cuando un accidente de tráfico lo dejó en una silla de ruedas, no ha sido un impedimento para cumplir ninguno de sus objetivos. Tan sólo hay que tener en cuenta que, en los últimos años, Carlos ha recorrido con su handbike Stricker algunas distancias que para muchos pueden parecer imposibles.
Natural de Valencia, este amante del deporte nunca ha visto ningún problema en el hecho de estar en una silla de ruedas. Lejos de amedrentarse, su situación es un ejemplo para muchas personas, siendo conscientes de que, con esfuerzo, superación, constancia, fuerza, tenacidad e ilusión, se pueden alcanzar todas las metas. Anhelos que ha dirigido a dos de sus pasiones: el contacto con la naturaleza y los viajes.
Comprobar la trayectoria deportiva de Carlos resulta impresionante, dado que, entre otros logros, a lo largo de su vida ha sido campeón de España en natación y esquí alpino, subcampeón en el descenso del Sella adaptado en piragua, jugador titular de baloncesto por comunidades, corredor en medias maratones, ha participado en carreras en handbike, como ha sucedido en la Copa Pirenaica de esquí alpino, ha logrado trofeos de pelota valenciana, pelota vasca y pádel y ha participado en competiciones de tenis, balonmano, pesca, tiro con arco, vela náutica, carrovelismo, esquí acuático adaptado, buceo y vuelo sin motor. Incluso, ha fundado el primer club nacional de cicloturismo adaptado.
Actividades deportivas que ha compaginado con diferentes aventuras en las que ha ido acompañado, única y exclusivamente, de su bicicleta adaptada. Entre otros viajes, en 2013, Carlos hacía el Camino de Santiago entre Roncesvalles y Finisterre, una experiencia que le sirvió de estímulo para llevar a cabo otros itinerarios, como sucedió al año siguiente cuando recorrió los 2.000 kilómetros que separan Valencia de Alemania, pasando por Francia o Italia. Luego, en 2015, este valenciano de 42 años dio la Vuelta a España, cuando tuvo la oportunidad de estar por primera vez en Huelva, desde donde inició la Ruta de la Plata hasta el norte del país. En total, 4.500 kilómetros de distancia. Por último, en 2017, estuvo en Islandia, recorriendo el país, único itinerario en el que ha ido acompañado por su hermano Michel, dada la complicación del terreno y las bajas temperaturas.
Después de todas estas aventuras, Carlos ha llegado a Huelva para iniciar un nuevo recorrido que le llevará a Portugal por la línea de la costa, desde el sur al norte, iniciando su viaje precisamente en la provincia onubense hasta llegar a Vigo (Galicia), un itinerario que podrá seguirse a través de su blog ‘El Viaje de Carlos’. Un viaje que realiza en su Stricker Handbike, como el patrocinio de Rodem. Una ruta de 1.200 kilómetros que ha iniciado este miércoles, 18 de julio, en Huelva y que le llevará durante unos 20 días a cruzar el país luso con su tienda de campaña.
Tal y como cuenta Carlos a Huelva Buenas Noticias, «este recorrido lo hago en mi silla de ruedas adaptada y una handbike, que se acopla a la silla, con la única ayuda de que es eléctrica de cara a las zonas de grandes pendientes. Cada día, tengo previsto hace unos 60-70 kilómetros aproximadamente, dependiendo de la climatología y circunstancias que me vaya encontrando». Un esfuerzo que este deportista ha querido llevar a cabo «con el objetivo de cerrar el círculo, porque hace dos años recorría España, pero me quedaba Portugal para completar la Península Ibérica, así que, a pesar de que tenía pensado descansar este verano, al final, me animé para continuar con esta ruta. Porque soy un apasionado del deporte y de la aventura».
Un nuevo reto para Carlos Sanchís que, principalmente, quiere dejar claro un mensaje a lo largo de su itinerario: «Lo enfoco desde la aventura y con la finalidad de promocionar el deporte adaptado, porque, aunque hago esto porque me gusta, quiero demostrar que todo el mundo puede hacer todo aquello que desea, lo que se propone. Tan sólo tiene que dar el primer paso para conseguirlo. Dentro de mis posibilidades quiero dar ese mensaje para romper barreras y normalizar el deporte adaptado». Una loable lección que Carlos Sanchís ha querido dejar en Huelva y con la que recorrerá Portugal. Mucha suerte.