Mari Paz Díaz. Amante del arte, Abraham Iglesias Rodríguez es un puntaumbrieño de 24 años que ha luchado por lograr su sueño: vivir de la danza, una actividad apasionante que desarrolla profesionalmente en Berlín (Alemania). Un logro que no ha sido nada fácil, puesto que es el resultado de una trayectoria que inició con tan sólo 10 años, cuando comenzó a tomar sus primeras clases de danza clásica en la Escuela ‘Arte y Ensayo’ de Huelva. Al principio, el joven se lo tomó como un juego, pero, poco a poco, se fue convirtiendo en una auténtica pasión, hasta el punto de querer dedicarse a esta actividad de forma profesional. Eso, a pesar de que, tal y como nos cuenta, «debido a los estudios y a la complicación de tener que trasladarme todos los días desde Punta Umbría a Huelva decidí dejarlo, porque era mi supuesto hobby, el que todo niño tiene, pero que desaparece cuando uno tiene que ir decidiendo a qué se dedicará de mayor». Sin embargo, este onubense se percató entonces que bailar era lo que realmente le gustaba, tanto que, «después de un año, sentí que necesitaba volver a expresarme y continuar con mi camino».
En este punto de su vida conoció a una persona que fue -y sigue siendo- clave en su trayectoria profesional. Se trata de Inmaculada Agudo, que «me enseñó que la danza puede ser un camino y abrió en mí la pregunta de si quería apostar por este tipo de carrera. Ella misma fue la que me ayudó a dar el paso para presentarme al Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma de Madrid, centro en el que, al final, conseguí una plaza para comenzar mis estudios en la especialidad de Danza Contemporánea. En total, fueron seis años de formación, que me han ayudado a conocer, comprender y digerir muchos campos de la danza, al tiempo que me han ayudado a entender que este es un camino en el que nunca se para de descubrir cosas nuevas». En Madrid, una persona clave para este joven puntaumbrieño ha sido el coreógrafo Pedro Berdäyes.
Tras acabar sus estudios en el Real Conservatorio Profesional de Danza Mariemma de Madrid, Abraham decidió salir de España en su afán de labrarse un futuro profesional en esta disciplina, al tiempo que daba respuesta a su curiosidad por conocer otras culturas. Su primer destino fue la capital belga, pero, como nos cuenta, «casi sin darme cuenta, el pasado mes de octubre terminé en Berlín realizando una producción en Deutsche Opery, consiguiendo estar presente en algunos proyectos que me están permitiendo seguir creciendo en el mundo de la danza». En la capital alemana, Iglesias forma parte de la Ópera de Berlín, además de trabajar con una coreógrafa de baile contemporáneo, su especialidad.
Logros de enorme valor que le han valido a Abraham Iglesias Rodríguez el reconocimiento de su municipio, que hace unas semanas le entregaba el Premio ‘Casa de la Juventud’, en la categoría de Arte. Un galardón que viene a avalar su carrera, tal y como hemos querido conocer en esta entrevista.
-Abraham, ¿cómo surge tu interés por la danza?
-Es algo difícil de explicar, porque creo que la danza es un arte que viene con todos nosotros. Pero, quizás, podría decir que mi interés por la danza nació por la curiosidad. Cuanto más conocía de la danza, más quería saber. El cuerpo también es curioso y siempre tiende a autodescubrirse.
-No es fácil dedicarse a esta actividad siendo de Huelva.
-En general, no es fácil dedicarse a esta actividad. Pero sí que me gustaría dar un toque de atención a aquellos que les toca cuidar el arte o la cultura en general dentro de la provincia: les ha tocado una tarea difícil, pero hay que avanzar y abrir puertas a nuevos conocimientos. Creo que tenemos mucha sensibilidad para percibir el arte y poca programación decente en los teatros.
-¿Cuándo y por qué te fuiste a Berlín?
-Cuando terminé mis estudios decidí pasar un año fuera de España para conocer nuevas culturas, idiomas, corrientes de danza… Decidí comenzar en Bruselas, pero, tras dos meses, realicé una audición en Deutsche Oper y me tuve que mudar ese mismo fin de semana desde la capital belga hasta Berlín. Podría decir que llegué a esta ciudad tirado por la corriente y, una vez aquí, decidí que me apetecía seguir descubriendo lo que ocurre. Pero no había planeado venir a esta ciudad en un principio.
-¿Qué estás haciendo allí?
-En el ámbito de mi carrera profesional, sigo teniendo actuaciones con la ópera, aunque finalizan ahora y hasta junio estaré trabajando con una coreógrafa con la que estoy descubriendo nuevas facetas. Después, para tener una seguridad económica, siempre es bueno tener algo estable. Por eso, cuento con un minijob en las mañanas. Y, en el ámbito personal, es una ciudad que te hace trabajar para que te descubras a ti mismo y puedas apostar por tus ideas propias.
-¿Hasta cuándo tienes previsto quedarte?
-En principio, tengo previsto estar en Berlín hasta finales de junio. Y, en septiembre, volveré a Alemania, pero a una ciudad diferente. Aun así, tengo la sensación de que me gustaría volver a esta ciudad más adelante.
-¿Cómo es tu vida allí?
-Una vida bastante normal. Tengo mis trabajos, intento tener un entrenamiento fuera, a parte de mis ensayos, y, lo más importante: dejar un espacio de descanso para tampoco olvidarme de conocer a la gente, la ciudad. Dejarme un espacio para realmente descubrir dónde vivo.
-¿Qué es lo que ha sido más complicado para ti en tu adaptación a Berlín?
-El clima y el idioma son, sin ninguna duda, dos factores complicados en esta ciudad para alguien que viene desde un lugar tan cálido.
-¿Qué es lo que más echas de menos de Huelva, de Punta Umbría?
-Lógicamente, lo que más echo de menos es mi familia y amigos. Dejando a un lado eso, su gastronomía y el clima.
-Acaban de reconocerte tu labor en el Ayuntamiento de Punta Umbría. ¿Qué ha supuesto para ti?
-En la rapidez de esta ciudad, este premio me ha ayudado a apartar de la mente todo lo que me ocupaba para sentirme por un momento en mi casa. Para recordar todo lo que aprendí en esa tierra y valorar que desde el lugar donde te has criado te manden esta energía tan grande. Es bonito saber que contamos con personas que nos tienen en mente.
-¿Se lo dedicas a alguien?
-Más que dedicárselo, este tipo de momentos siempre se los debo y los comparto con mi familia. Además, aunque siempre me he dirigido a las instituciones públicas de la provincia para intentar recibir alguna ayuda económica, soy de ese grupo de estudiantes que nunca ha recibido apoyo de becas ni subvención. Y, aún así, con unos padres sumergidos en la crisis, ellos han decidido apostar por mí hasta en momentos donde pasábamos miedo por esa situación. ¿Qué más se puede pedir?
-¿Tienes previsto algún otro proyecto?
-Una vez termine con el proyecto de danza al que pertenezco en Berlín, tengo la suerte de contar con un contrato para comenzar a trabajar a partir de septiembre como bailarín residente en un teatro del país alemán. Además de estos proyectos que ya están cerrados, estoy intentando llevar este verano un poco de danza por algunos pueblos de Huelva, pero aún es sólo un boceto.
-¿Algún sueño por cumplir?
-Creo que para seguir adelante en esta carrera uno tiene que sentir y repetirse a sí mismo que siempre que se mantenga en este camino está cumpliendo sus sueños muy poco a poco. Aunque algo que me gustaría sería en un futuro poder crear una plataforma de danza en Huelva y así poder estar por un período en la tierra donde nací y transmitir algo de lo aprendido a la gente con la que más conexión tengo. Pero sé que es un proyecto que necesitará mucho tiempo.
-¿Algún mensaje final?
-No me gustaría no dejar un espacio para animar y llamar a la gente de la provincia para que asista a los teatros, para que demanden más arte.
1 comentario en «El bailarín puntaumbrieño Abraham Iglesias forma parte de la Ópera Alemana de Berlín»
ENHORABUENA ABRAHAM, TE VI HACE UNOS AÑOS ACTUAR EN EL TEATRO DE CORRALES Y SE NOTABA QUE IBAS A LLEGAR LEJOS Y TRIUNFARÍAS.
NO SABES LA ALEGRÍA QUE ME DA, QUE LA GENTE DE PUNTA UMBRÍA DESTAQUE POR SU BUEN HACER.
FELICIDADES Y QUE SIGAN TUS EXITOS.
Fernando Barranco Molina