Redacción. Las artes dentro del cine es el tema de este primer día de Wofesthuelva. La compositora de música, Aránzazu Calleja y la directora del aclamado documental sobre el mundo del ballet Dancing Beethoven, Arantxa Aguirre, abren el programa de actividades de esta edición acercando la música y la danza a la Universidad de Huelva y la Universidad Internacional de Andalucía.
La jornada comenzó con la proyección en Niebla del documental Dancing Beethoven de la directora Arantxa Aguirre, gracias a la colaboración de la Diputación de Huelva, que termina así su recorrido por los pueblos de la provincia antes de proyectarse mañana sábado 10 de marzo en el Gran Teatro a las 18:00 horas.
Aránzazu Calleja, compositora de bandas sonoras, presentó acompañada de Cinta Marcos, directora de Igualdad y Atención a la Diversidad en la Universidad de Huelva, su masterclass ‘La música en el cine: el arte del engaño’. “La música en el cine es pura manipulación”, comenzó Calleja su intervención. La compositora bilbaína explicó cómo utilizar la música en el cine puede ayudar a transmitir un mensaje que se escapa al poder de la palabra y de la imagen. “La música es un truco para que la historia nos cautive mejor y nos lleve dentro de la historia”.
Desde el silencio hasta el tipo de instrumento utilizado, la elección de cada elemento cuenta. “Pensar en el silencio como recurso con significado propio también es hacer música en el cine”. Calleja comienza hablando del silencio como recurso básico. “El hecho de no usar la música es un recurso muy expresivo con valor por sí solo”.
Calleja destacó el impresionante trabajo de las compositoras Mica Levi, nominada al Oscar por la banda sonora de Jackie, y de Rachel Portman, la primera mujer en ganar un Oscar por la composición de la banda sonora de la película Emma que volvió a estar nominada por su trabajo en Chocolat y Las normas de la casa de la sidra.
La masterclass destripó algunos de los secretos mejor guardados por los compositores cinematográficos y expuso con ejemplos cómo cada uno de los recursos contribuían a crear una emoción distinta en el espectador.
La Universidad Internacional de Andalucía acogió un encuentro con el alumnado para hablar de mujer, cine y música. El vicerrector de la UNIA, Agustín Galán, reafirmó el apoyo de la universidad al proyecto Wofesthuelva. “Estamos encantados de colaborar con Wofesthuelva por tercer año y ojalá podamos colaborar aún más el año que viene acogiendo más actividades como esta en nuestra sede de Santa María de la Rábida”.
Acercar el cine y las artes dentro del cine al público onubense es uno de los objetivos de Wofesthuelva de este año. “La mujer representa apenas un 1% dentro del mundo de la composición cinematográfica, un porcentaje muy bajo”, recordó la directora de Wofesthuelva, María Luisa Oliveira.
Este problema de visibilidad y representación lo recordó Calleja. “Sí hay mujeres, sí hay. Pero no se ven. Hace falta crear modelos para poner referentes y que más mujeres se vean reflejadas y sepan que pueden llegar, que pueden hacerlo”.
La conciliación entre el mundo laboral y el mundo personal también es una asignatura pendiente dentro del cine profesional. “Siempre depende al final de la persona, pero la realidad es que el hombre se puede ausentar de manera más fácil de las responsabilidades familiares frente a una mujer. Está mejor visto, tienen más facilidad para desaparecer temporalmente y luego volver. La mujer lo tiene más difícil”, reflexionó la compositora Aránzazu Calleja.