Juan Carlos León Brázquez. El Nerva C.F. (1917-2017) ya forma parte del exclusivo grupo de equipos centenarios de la provincia de Huelva, junto al Ríotinto Balompié, La Zarza, La Palma y el decano Recreativo de Huelva. Ninguna otra provincia española tiene cinco clubes centenarios. Así quedó de manifiesto en las distintas intervenciones este domingo en un Teatro Victoria lleno de personas venidas de toda España, Francia y hasta de Estados Unidos, para reconocer a los jugadores más antiguos de esta población minera, que desde sus inicios estableció una perpetua rivalidad con sus vecinos del Ríotinto Balompié.
La emoción fue la nota dominante en una larga Gala, en la que no solo los más veteranos recibieron un diploma de reconocimiento, sino que se proyectaron varios vídeos con la historia del club, cuyo dato más antiguo, mayo de 1917, puso en valor el historiador Juan Manuel Pérez López. Recuerdos emocionales especiales para los que ya no están y han sido estrellas locales o personajes que con su dedicación han hecho posible la continuidad en el tiempo de un club modesto que ha padecido los vaivenes de una mina en declive y la emigración de la que llegó a ser la población más grande de la provincia y aun así la semilla del futbol quedó tan arraigada que ha sido capaz de celebrar ahora su centenario, como cierre a todos los actos que se programaron en 2017.
Una concentración de jugadores de distintas épocas en el Teatro Victoria de Nerva, en una Gala especial dedicada al Centenario, en la que fue presentado un libro con la rica historia del futbol en la localidad minera y una gran exposición de fotografías, de estos primeros cien años. Un fin de semana muy futbolero, en el que las anécdotas y chascarrillos han centrado el debate entre quien era el mejor goleador, el mejor portero o el mejor defensa; en si te acuerdas cómo te hice un caño en tal o cual partido, en la que se ha recordado a los amigos que ya no están, en los triunfos o las derrotas, en los largos y destartalados desplazamientos… vida de futbolista.
Si los ingenieros y técnicos británicos presentes en la mina inocularon el virus del deporte en la zona minera y el Real Club Recreativo (1889) aparece como el club decano del balompié español, no es menos cierto que en todos los pueblos de la cuenca minera los obreros quisieron imitar pronto a la élite británica que empleaba su tiempo de ocio en dar patadas a un balón. Poco a poco se van consolidando los campeonatos y los enfrentamientos entre los equipos de los pueblos vecinos, siendo Ríotinto, con el apoyo de la compañía minera el que lidera el peso principal del auge de este deporte. En Nerva proliferaron los equipos de futbol estableciéndose incluso un campeonato local, dado que la población era el principal foco poblacional de toda la cuenca, aunque no contó inicialmente con el apoyo de La Compañía, la RTCL. Una nota aparecida en octubre de 1919 en una publicación de la época, Huelva Sport, nos decía que “Hace aproximadamente tres o cuatro años, que unos entusiastas futbolistas organizaron el equipo Nerva F.C. y como no tenían un campo de juego para celebrar los partidos, a pesar de haberles ofrecido la Compañía de Rio Tinto hacerles uno, como se lo había hecho a Riotinto, El Valle, El Campillo, La Dehesa y La Atalaya, fracasaron en su gestión y se hundió el Club. Después de un intervalo de dos años, ha vuelto a surgir este Club, debido a los titánicos esfuerzos de algunos aficionados”, lo que nos sugiere que el futbol nervense tiene más de cien años, pero la primera nota aparecida en la prensa se remonta a 1917, cuando el diario La Provincia publica que “El próximo domingo se jugará un importante partido en el campo de Mesa Pinos, entre los equipos de Nerva y Río Tinto”. Ambas notas han sido rescatadas por José Luis Lozano Álvez, quien pacientemente durante años ha acumulado más de 500 fotografías y documentos sobre el fútbol en Nerva y que ahora han visto la luz en un voluminoso libro, publicado por la Diputación de Huelva, con el título “Nerva, 100 años tras un balón”.
Nerva ejemplifica lo que es el desarrollo del fútbol modesto, del fútbol obrero, del que no obstante han salido magníficos jugadores que han despuntado en clubes de primera línea. Juanín, todo un ídolo en el Córdoba donde metió el primer gol del equipo en Primera División; o su hermano Ramoncito que pasó por el Sevilla y el Betis; Antonio Galindo y Antonio Muñiz vistieron la camiseta del Sevilla; Manuel García pasó por el Betis y el Alavés; y por el Recreativo de Huelva pasaron Antonio Segovia y Manolín Bella. O Toli que destacó en Alemania y cuando volvió a Nerva se dedicó a entrenar al equipo de sus amores. Actualmente, es Fidel Chaves, Fide, quien milita en el Almería y que ha pasado por la primera división con el Elche y estuvo dos temporadas en el Córdoba, el que mantiene su origen nervense en las primera línea futbolística. También una mujer vinculada a Nerva, Silvia Gaviro, se encuentra entre las elegidas, ya que durante tres temporadas fue votada la mejor jugadora nacional, siendo llamada a la Selección Española femenina. Ella recogió su diploma emocionada, con sentidas lágrimas, conocedora de que su ejemplo sirvió para que las chicas nervenses también practicaran este deporte.
Todo un homenaje a una sociedad en la que hace cien años se incrustó el gusanillo de un deporte traído por los ingleses y que impregnó a un mundo mayoritariamente obrero, capaz de romper las barreras de clase de quienes nos enseñaron a dar patadas a un balón. No solo hablamos del Nerva C.F., el club que pervivió en el tiempo, sino de los que sirvieron de base para el desarrollo del balompié en la localidad: El Iberia, el Patria, el Betis Nervense, el Calavera, el San Jerónimo, el Juventud o el Deportivo Nervense. Equipos de las barriadas nervenses, rivales entre sí, que muestran el interés despertado por este deporte británico. Recuerda Antonio Granados Valdés, tan centenario él como el futbol de su pueblo (Nerva, 11 de diciembre de 1917), que su padre le consiguió un puesto de aprendiz en una barbería del pueblo, porque decía que ya no podía pagarle más alpargatas y zapatos remendados de tanto darle a aquellas pelotitas caseras, hechas con ovillos de ropa vieja y atadas con guitas. Él siguió jugando al futbol, aunque la guerra civil cortó su proyección como deportista al no poder fichar por el Real Betis Balompié, que le había ofrecido un contrato. Y hoy desde Madrid rememora también este centenario, que él ha recorrido en vida paralela.
El presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo y la delegada de Cultura, Turismo y Deporte de la junta de Andalucía en Huelva, Natalia Santos, junto a los presidentes de la Federación Onubense de Futbol, del Recreativo de Huelva y el de La Palma, arroparon con su presencia este acto multitudinario. En sus intervenciones se destacó la importancia que tiene el deporte base para la formación de los jóvenes e Ignacio Caraballo, no solo recordó su época de jugador, sino que alentó a los jóvenes en los valores que aporta el deporte, señalando la exclusividad de tener en Huelva cinco clubes centenarios, “lo que es todo un privilegio”. La Federación Andaluza de Futbol entregó la medalla de oro al joven presidente de solo 26 años del Nerva C.F., Josema Domínguez, quien mostró su orgullo por representar al presente de éste Centenario Club.