Redacción. La Policía Local de Huelva lleva intervenidos en lo que va de año en la capital un total de 6.397 kilos de alimentos procedentes de la venta ambulante ilegal, productos que no cuentan con ningún tipo de control sanitario ni registros de trazabilidad alimentaria.
La última actuación de los agentes se ha llevado a cabo en las barriadas onubenses de Isla Chica y La Orden y ha permitido recuperar 360 kilos de mercancía, de los que unos 200 kilos de naranjas se prevé que, dada su presentación, pueden provenir de robos perpetrados en el campo, cuestión que en estos momentos está aún por determinar y para cuyo esclarecimiento se está contando con la colaboración de la Guardia Civil.
En este sentido, hay que señalar que esta intervención policial ha estado centrada en el control y seguimiento de los vehículos lanzadera que suministran alimentos a los vendedores callejeros, amontonando incluso la mercancía directamente en el fondo de maleteros de automóviles y furgonetas.
Por otra parte, cabe indicar que los efectivos de la Policía Local también han decomisado en la ciudad en este 2017 un total de 1.153 objetos, de los que 761 corresponden a DVDs, y el resto a textil, calzado y complementos.
En este marco, tal como ha señalado el concejal de Seguridad Ciudadana, Movilidad y Tráfico, Enrique Gaviño, “desde Policía Local se está trabajando en la erradicación de estas actividades ilícitas, especialmente desde el pasado mes de abril, cuando se puso en marcha un plan de acción entre el Ayuntamiento y la Subdelegación del Gobierno para coordinar esfuerzos para acabar con la venta ambulante ilegal en la ciudad”.
Recordar también que, desde la Concejalía de Empleo, Desarrollo Económico y Proyectos se llevó a cabo la campaña ‘No a la venta ambulante ilegal; sí al comercio tradicional’, con el fin de concienciar y advertir a los ciudadanos de los riesgos que conlleva la compra de productos perecederos de dudosa procedencia y de artículos falsificados. Dentro de esta campaña el Consistorio ha editado 25.000 dípticos informativos, con el fin de apoyar al comercio de proximidad y trasladar a los onubenses el mensaje de que quien participa de esta venta ilegal pone en riesgo su salud y la de los suyos, renunciando a sus derechos como consumidor al apoyar a las ‘mafias’, así como contribuyendo a que cierren comercios y empresas en Huelva y se pierdan puestos de trabajo.