S. D. Ilusión, bendito tesoro. Esa es una de las premisas en las que se va a sustentar el nuevo Recreativo de Huelva de la temporada 2017-18, y que bien personifican los dos primeros jugadores que, de manera oficial, fueron presentados. El lugar donde ‘empezó todo’, El Velódromo, fue el elegido para dar a conocer a la afición recreativista a dos jugadores, Diego Jiménez -por cierto ya conocido de su etapa anterior en en el Decano-, y Sergio González.
Ilusión por jugar en el Recre, por recalar en un club con la historia del onubense, con ganas de aportar el granito de arena justo y necesario para llevar a buen puerto una nave que ha estado varias veces -y el riesgo continúa- de hundirse para siempre. Esa es la base del proyecto, reconocido por ambos centrales, al que unieron, como no, la ambición.
“No me lo pensé cuando me propusieron volver, porque lo hago al sitio en el que fui feliz”. Primeras palabras de Diego Jiménez, que llega procedente de la UE Llagostera, a donde recaló precisamente del Decano, del que salió en un momento complicado de la entidad. El central zamorano reconoció que en ese momento “necesitaba salir del club”, incidiendo que “fue muy duro en lo psicológico por cómo estaba el Recre”.
Ahora la historia es diferente, y como el propio jugador señaló “el club está saliendo a flote, y las cosas se están haciendo bien”. Indicó que “ha llegado gente de fútbol”, por lo que no tuvo ninguna duda en “apostar por entrar en este proyecto. Ni me lo pensé”.
Diego Jiménez reconoció que llega al Recre “con muchas ganas, con ilusión”, mostrando su confianza en “aportar mucho al equipo”.
Sergio González, por su parte, también habló de la ilusión que le genera pertenecer a un club como el Recre. Por eso lo primero que quiso decir el madrileño es que daba “las gracias al club por darme esta oportunidad”, recalcando que llega “con ilusión y también ambición”.
Se mostró confiado en que “todos vayamos en la buena dirección”, destacando sobre todo la palabra “equipo”, que es según comentó donde se basa todo el trabajo.