S. D. El Club Onubense de Deportes Adaptado (CODA) celebró el pasado viernes una jornada de convivencia con la que se puso final a la temporada. El acto tuvo lugar en el Parador de Mazagón, y allí el equipo capitalino, referente de los clubes de discapacitados a nivel territorial y nacional, durante una merienda hizo entrega de obsequios a sus deportistas más destacados.
Alrededor de 20 deportistas y sus padres disfrutaron de una plácida tarde, donde el club por mediación de su directiva entregó unos polos a casa uno de sus deportistas.
Por parte de los técnicos se entregaron los premios a los deportistas más destacados, teniendo en cuenta varios conceptos: asistencia a los entrenamientos, implicación con el club, compañerismo, resultados deportivos, etc. Debido a la gran cantidad de deportistas este año se ha ampliado a seis los premiados.
Hubo ocasión de despedir a uno de los técnicos, Jesús, que se marcha a su ciudad natal, Almería, después de compartir unos años con el CODA, y por tal motivo los chicos le entregaron varios obsequios personalizados.
El Club que, a día de hoy está en el segundo puesto por clubes a nivel nacional, espera el inicio de una nueva temporada a primeros de septiembre en los lugares de siempre, polideportivo Diego Lobato y estadio Iberoamericano ‘Emilio Martín’.
En esta jornada de convivencia estuvo presente una representación de la junta de gobierno de la hermandad del Silencio, a la que se agradeció el gesto de donar una carpa de 3×4 a los deportistas del club.