Carlos Ramírez. Esta semana os traigo un plato muy sencillo de preparar:
Ingredientes para 6 personas
– 400 gr. de bacalao desalado entero o en migas
– 5 patatas
– 1/2 cebolla
– 20 gr de mantequilla
– 1 cucharada de harina
– 1/2 litro de leche
– Aceite de oliva y sal
Elaboración
Partimos el bacalao desalado tras el clásico proceso de dejarlo en agua unas 36 horas dentro de la nevera y cambiando el agua cada 12 horas (podemos hacerlo con bacalao congelado, pero perderemos en sabor). Una vez el bacalao está en su punto, cortaremos pequeñas tiras, con las manos o con un cuchillo afilado. Las reservamos en agua (también podéis usar migas de bacalao troceándolas cuando estén desaladas).
Pelamos las patatas y las cortamos en rodajas como cuando vamos a preparar una tortilla de patata y las freímos ligeramente sin que se lleguen a dorar. Luego terminarán de hacerse en el horno. Colocamos la mitad de las patatas una vez fritas y escurridas en la base de una fuente amplia.
Picamos en juliana media cebolla y, mientras se pocha a fuego lento, cocemos los trozos del bacalao en la leche durante dos o tres minutos. Después ponemos las tiras de bacalao con la cebolla y las salteamos juntas. Colocamos el bacalao y la cebolla sobre las patatas en la fuente.
Preparamos una bechamel muy ligera con la mantequilla, la harina y la leche en que cocimos el bacalao, añadiendo más leche si fuera necesario. Una vez comience a espesar, lo añadimos a la fuente dejando que se reparta entre los huecos y que cubra las patatas.
Horneamos a 190º durante 15 minutos y después gratinamos hasta que se tueste la capa superior. Servimos bien caliente.
Opcionalmente podemos poner queso por encima en el momento del gratinado.