HBN. El portavoz de Izquierda Unida en la Diputación de Huelva, Pedro Jiménez, defenderá en el próximo pleno una iniciativa para que la Consejería de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía tome medidas y “refuerce los mecanismos de inspección y control de todas las balsas mineras que existen en la provincia de Huelva para evitar que se produzcan más vertidos de aguas ácidas, como el que sucedió el pasado día 18 de mayo al romperse la presa de la balsa minera ubicada en la localidad de La Zarza”.
Estos hechos ponen de manifiesto el deficiente estado de conservación y mantenimiento del sellado de la corta minera de La Zarza. En este sentido, Pedro Jiménez destaca que “para Izquierda Unida, tras el desastre de Aznalcóllar y el reciente vertido de La Zarza, lo importante es actuar para prevenir este tipo desastres medioambientales”.
En la provincia de Huelva existen numerosas cortas y balsas, como consecuencia de la actividad minera, y muchas de ellas se encuentran en estado de abandono, sin que parezca que las medidas de protección y seguridad por parte de las empresas mineras responsables puedan garantizar que este tipo de vertidos no se vuelvan a producir.
Por ello, Izquierda Unida exige a la Consejería de Medio Ambiente, a través de la iniciativa que va a defender en la Diputación, que “ejerza con garantías la labor de vigilancia y control para evitar que la inacción de las empresas propietarias provoque más accidentes como el de La Zarza”. Jiménez añade que “no se trata sólo de depurar responsabilidades una vez que se producen este tipo de desastres, sino también de poner encima de la mesa medidas para evitar que se produzcan más en el futuro”.
Además, Izquierda Unida reclama también a la Consejería de Medio Ambiente que exija a las empresas propietarias de cortas y balsas mineras que lleven a cabo un adecuado mantenimiento de las mismas, garantizando la seguridad de las éstas y el cumplimiento estricto de la legislación en esta materia. Izquierda Unida también pide un Plan de limpieza y recuperación del cauce del río Odiel para remediar los provocados por el vertido de La Zarza.