HBN. Una alegría es mayor si se comparte. Frase que todos hemos escuchado en algún momento de nuestra vida, y que incluso hemos hecho propia en más de una ocasión. No se trata solamente de celebrar lo positivo que nos pase, si no que nos gusta y nos emociona hacerlo rodeado de nuestros seres queridos. Es así como nuestra felicidad se ve multiplicada. Esta es una de las razones por las que cada vez prestamos más atención a los pequeños detalles en nuestras celebraciones. Deseamos que el lugar que elegimos para nuestro gran evento sea perfecto, confiando en que durante el ‘gran día’ solo tengamos que preocuparnos por disfrutar.
En este sentido, la provincia onubense oferta un gran número de salones de celebración. No todos, sin embargo, reúnen las condiciones ideales para que nuestro evento luzca como deseamos. En la parte alta de la finca ‘Las Cabezuelas’, a tan solo cinco minutos de Cartaya, a diez de Lepe y a veinte minutos de distancia tanto de Huelva capital como de la vecina Portugal, se encuentra situada la Hacienda Valdeflores.
En medio de un extenso mar de pinares y árboles frutales y embriagado por la brisa del océano que baña nuestro litoral, localizamos un rincón entrañable para elegir como lugar de celebraciones. Conservando el estilo de un cortijo andaluz, Hacienda Valdeflores se presenta como un espacio que desprende magia y tradición.
En funcionamiento desde hace más de 15 años, la experiencia y profesionalidad es unos de los principales avales de este negocio familiar. Huelva Buenas Noticias ha conversado con Carlos Camacho, gerente de esta empresa que abrió sus puertas como salón de celebraciones en el año 2002. ¿La razón que les empujó a dar el paso? «Principalmente, lo que nos animó fue el hecho de comprobar que el mercado de las bodas estaba en alza», explica Carlos Camacho. Asimismo, habían observado que la zona en la que residían carecía de este tipo de negocios. De esta forma, dieron un paso al frente e iniciaron una aventura como emprendedores que, hasta el momento, y gracias a un trabajo permanente, los ha hecho merecedores de un gran prestigio. De destacar una fecha que haya marcado un antes y un después para Hacienda Valdeflores, su gerente destaca el 2012, año en el que comenzaron a gestionar todos los servicios relacionados con la celebración. Esto es, cuentan con catering propio, así como se encargan también de la decoración, música o fotografía, entre muchos otros servicios.
En cuanto al diseño y características de las instalaciones, desde este espacio de celebraciones destacan su tranquilidad y amplitud. La Hacienda cuenta con jardines, salones y una gran zona de aparcamientos. «Situados en mitad de los pinares, no presentan problemas en relación a vecinos», incide el gerente del negocio. En cuanto al exterior, la blanca fachada, que simula a un cortijo andaluz, presenta una gran flexibilidad en relación a su decoración. Asimismo, en el interior, la decoración es atemporal y elegante, lo que, señalan, «no le hace necesario añadidos».
En total Hacienda Valdeflores cuenta con seis hectáreas. Dos de ellas destinadas a hostelería y otras cuatro, a temas agrícolas. De las dos hectáreas destinadas a hostelería, encontramos 4500 m2 de jardín, 5000m2 de aparcamiento, un salón principal de 1000m2 y otro secundario de 700m2, más la cocina, de 600m2.
A pesar de la intensa crisis económica que ha afectado a nuestro país, incidiendo duramente en el sector nupcial, Hacienda Valdeflores organiza alrededor de 60 bodas por temporada, siendo las estaciones de primavera y verano, de marzo a octubre, donde se concentra el mayor número de reservas.
En relación a la calidad y al servicio, este espacio se posiciona con precios populares. En este sentido, ofrecen a los clientes diferentes paquetes entre los que pueden elegir, utilizando siempre y promoviendo productos de la zona, resaltando de esta forma el valor gastronómico de Huelva. Un dato a señalar es que, por razones de organización y fechas, trabajan con un año de antelación.
El buen hacer de la Hacienda es una de las razones por las que muchos de sus clientes llegan a la finca gracias a recomendaciones y por lo que conocemos como por «el boca a boca». Así, están acostumbrados a recibir a personas de toda la geografía española, tanto de la zona como de fuera, en su mayoría madrileños o gallegos en verano.
Mirando al futuro, sumado a las mejoras que realizan anualmente de aspectos tanto internos como externos del negocio -pintura, jardinería, limpieza o asfaltado, entre otros- de cara a los próximos dos años, Carlos Camacho expresa la intención que tienen de ampliar las instalaciones de la Hacienda para poder celebrar dos eventos a la vez, «sin que una celebración afecte a la otra, y teniendo ambas una zona de aparcamiento independiente», nos cuenta. Un proyecto que se encuentra realizando otro de los hijos -arquitecto de formación- de los propietarios de las instalaciones de la Hacienda.
De tener que definir la firma, desde Hacienda Valdeflores señala que excelente calidad y servicio son máximas para ellos, aspectos intocables. «Exquisitez en atención al cliente. Cuentan con la fidelidad de familias enteras en las que diferentes generaciones han ido pasando sus instalaciones y servicios», explica Camacho. En este sentido, anima a todos los lectores a elegirlos como salón de celebraciones si lo que desean celebrar una boda, bautizo, comunión o cumpleaños en un entorno idílico, cómodo, asequible y accesible.