S. D. El Club Balonmano Pedro Alonso Niño de Moguer afronta un encuentro clave en su batalla por la salvación este sábado a partir de las 18:00 horas en Málaga ante el Maristas, el equipo con el que debutó en casa el técnico Máximo Gutiérrez y al que ya ganó en el Zenobia por 39-30, en el inicio de una mejor dinámica del equipo, que le ha mantenido con opciones hasta hoy.
En esta penúltima jornada de la Liga en el grupo F de la Primera Nacional de Balonmano el conjunto moguereño necesita ganar, y además puede verse beneficiado por los resultados de sus rivales para alcanzar la salvación, ya que podría depender de sí mismo en la última jornada para certificar su continuidad en la categoría.
El conjunto amarillo ahora mismo es penúltimo con 19 puntos, dos más que el colista el Manzanares, y uno menos que el Villafranca y el Bolaños. Con 21 puntos es quinto por la cola el Agrifluide La Salle, y con 23 está el Melilla Virgen de la Victoria y el Tenerife Laguna.
Si el PAN Moguer gana y pierde el Villanfranca en su visita al líder Los Dólmenes en Antequera, o en el duelo directo entre el Bolaños y La Salle lo hace alguno de los dos o hay empate, el equipo que dirige Máximo Gutiérrez saldrá de la zona de descenso y dependería de sí mismo en la última jornada, en la que recibe al Manzanares.
Así de claro lo tiene el técnico amarillo, que ha recordado que “si ganamos dependemos de nosotros mismos si se dan otros resultados. Creo que sería lógico que el Bolaños perdiera con La Salle tras jugar su tercer partido en una semana y debería pagarlo, pues jugaron entre semana con el Lanzarote. Además el Villafranca juega con el Antequera y creo que deberían de darse los resultados lógicos, pero todo pasa por ganar nosotros”.
“Mis jugadores han demostrado ser unos héroes esta temporada y hay que rematar el trabajo en estas dos semanas”, resaltó Gutiérrez, que asimismo valoró que recupera al sancionado Isaac Cumbreras, aunque sigue de baja Sergio Cruzado. “El equipo está con muchas ganas y los entrenamientos los han hecho con mucha intensidad”, recalcó.
Gutiérrez comentó que han pasado la semana “con datos del Maristas sobre la pista y conceptos claros para pararlos, con la misma filosofía que ponemos en práctica desde el primer día, defender y correr. Así tuvimos un gran resultado en la ida en Moguer, pero éste es un partido totalmente distinto”.
“Nosotros nos jugamos mucho. La presión también juega un factor grande en este partido. Espero que mis jugadores disfruten. Están totalmente capacitados y han demostrado partido a partido que cada uno de ellos son de piel amarilla y azul”, señaló el entrenador moguereño.
Del rival expuso que “ellos llegan sin nada en juego en la clasificación. Es el último partido en su casa, tiene jugadores muy buenos y como ya demostraron en la ida y en su pabellón todo será distinto, como demuestra esta Liga”.