HBN. La Prisión Provincial de Huelva comienza a preparar ya la que será la XIX Peregrinación a la aldea del Rocío del próximo año 2018, después del éxito de la XVIII edición, que finalizaba en la tarde este miércoles 26 de abril. Una peregrinación que se ha desarrollado este año con total normalidad.
Una actividad que se desarrollaba durante dos días de camino y que, como ya sucediera en años anteriores, ha tenido un marcado carácter solidario. Y es que los participantes han sustituido las ofrendas florales que hacen a lo largo del camino por alimentos que se destinarán a los más necesitados.
Una peregrinación que, una edición más, ha cumplido con su objetivo de contribuir a la reinserción social de los internos de la Prisión Provincial de Huelva, una cuestión que nunca debe olvidarse de esta peregrinación religiosa. No en vano, son muchos los momentos de convivencia que se producen durante estas dos jornadas.
En cuanto a la estructura de la peregrinación en sí, la programación ha sido muy similar a la seguida en ediciones anteriores. De esta forma, el inicio de la marcha tuvo a primera hora de la mañana de este martes, 25 de abril, realizando las paradas habituales en San Juan del Puerto, Moguer, el Coto de Montemayor o El Milanillo, haciendo noche en la casa de la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Palos de la Frontera.
La llegada al Rocío se produjo este miércoles día 26, jornada en la que se encontraron con la Blanca Paloma en su Ermita, donde se celebraba por la tarde una misa de despedida de la peregrinación, misa que fue cantada por el Coro de la Hermandad Matriz del Rocío de Almonte.
En El Rocío, además, el obispo de Huelva, José Vilaplana, tuvo la oportunidad de bendecir las medallas de esta asociación rociera nacida en la Prisión.
