HBN / S. B. La Ilustre Hermandad de Penitencia y Cofradía de Apostolado del Santísimo Cristo de la Fe y Nuestra Señora de la Caridad ha abierto un año más las procesiones en la capital onubense este Viernes Santo desde la Parroquia de Santa María Madre de la Iglesia, situada en el Barrio de Viaplana, dode a las 16.45 horas, como estaba previsto, iniciaba su salida procesional para encontrarse con Huelva. Sin embargo, la salida procesional ha estado marcada por un retraso de unos 45 minutos provocado por la rotura de uno de los varales del paso de palio de la Virgen de la Caridad, cuando realizaba la primera levantá en el interior del templo.
Tras unos primeros minutos de angustia, la hermandad ha podido solucionar los problemas del varal suelto, aunque todo ello ha provocado un ostentoso retraso. Sin embargo, el resto de hermandades que procesionan en el Viernes Santo onubense decidían retrasar su salida 45 minutos para que La Fe pudiera hacer su recorrido con normalidad y pasar por Carrera Oficial.
A pesar de estos problemas, una vez solucionados, todo un barrio, el de Viaplana, ha mostrado su devoción un año más a sus dos imágenes emblemáticas: el Cristo de la Fe y la Virgen de la Caridad, cuyos puntos de interés en su recorrido se concentran en el convento de las Hermanas de la Cruz, como hemos apuntado, la Capilla de Ntra. Sra. de la Esperanza, la cuesta de Duque de Ahumada, la estación de Bomberos, entidad a la que está muy unida esta hermandad y, cómo no, su recogida en el templo.
Una procesión que este año ha estrenado el dorado del frontal de la canastilla del paso de misterio, obra de Abel y Justi Doradores, «principal novedad de este año», según nos comentaba el hermano mayor de La Fe, Manuel Quesada. Un paso que representa el momento previo a la bajada de Jesús de la cruz. Así, junto al crucificado de la Fe, obra de Antonio León Ortega de 1975, donde aparecen María Magdalena, realizada por Elías Rodríguez Picón en 2004, así como José de Arimatea, Nicodemo y dos centuriones romanos, obra todos ellos de José María Leal.
En cuanto al acompañamiento musical, el paso de misterio del Stmo. Cristo de la Fe, que simboliza el buen fin, el momento de la bajada del Señor de la Cruz, ha estado acompañado un año más por la Agrupación Musical Santísimo del Cristo del Amor, perteneciente a la Hermandad de la Sagrada Cena de Huelva.
Más novedades hemos podido observar en el paso de palio de la Virgen de la Caridad, obra de Joaquín Ossorio, que no sólo ha estrenado la cruz pectoral, sino que, por primera vez, ha estado acompañada por la Banda de Música Nuestra Señora de la Cinta de Huelva.
Una novedad para este 2017, que es el último año como hermano mayor de La Fe de Manuel Quesada, que no volverá a presentarse a la reelección al cargo. Por el momento, sí ha lanzado públicamente su candidatura José Antonio Burgalat Laureano, candidatura aprobada por la autoridad eclesiástica el pasado 21 de marzo. Además, no podemos olvidar que esta cofradía tiene como hermano mayor honorario y camaristas de Nuestra Señora de la Caridad a sus Majestades los Reyes de España.
El cortejo de esta procesión ha estado compuesto por unos 300 nazarenos con sus túnicas y guantes negros y antifaz, capa, cíngulo y botonadura de color rojo burdeos, que acompañan a esta hermandad joven, fundada en el año 1988.
En definitiva, una hermandad de barrio que cierra un año más la Semana Santa onubense, al ser la última cofradía que se recoge este Viernes Santo. Un momento muy emotivo, al que los devotos y vecinos de Viaplana no faltan ningún año, como se ha demostrado especialmente este 2017, a pesar de los problemas de la salida.
