HBN. La Guardia Civil ha confirmado, gracias a las pruebas de ADN realizadas, que el cadáver calcinado hallado en un asentamiento de chabolas en Moguer es el de José Brimes Carrasco, el onubense que desapareció de su domicilio en Corrales (Aljaraque) el pasado 1 de septiembre.
Asimismo, aunque las investigaciones siguen abiertas, todo parece indicar que se trata de una muerte accidental.