Redacción. Después de casi cinco meses, de forma extraordinaria la Venida tuvo lugar este año el pasado 5 de junio, y no el penúltimo domingo de agosto, con motivo de la celebración del XXV Aniversario de la Coronación, la Patrona de Moguer, la Virgen de Montemayor, cumpliendo un año más con la tradición, será trasladada el último domingo del mes de octubre, este día 30, desde el templo parroquial hasta su ermita.
A hombros de sus costaleros, el traslado de la Virgen de Montemayor comenzará en la iglesia parroquial a las 15.00 horas, para iniciar un pequeño recorrido por las calles de la ciudad y posteriormente completar los dos kilómetros que separan Moguer del coto que rodea a la ermita.
Presencia del obispo. En la salida estará presente el obispo de Huelva, José Vilaplana, que acompañará a la Virgen durante parte del recorrido de la procesión por el caso urbano. Este será el ultimo acto de la visita pastoral a Moguer que el obispo realizará esta semana.
Con anterioridad al traslado de la Virgen, tendrá lugar a las 8 de la mañana desde la iglesia parroquial el último Rosario de la Aurora, un rezo que se ha repetido todos los domingos del mes de octubre por los distintos azulejos repartidos por las calles y plazas de la localidad. Los actos previos a este tradicional traslado concluirán con la celebración de la Santa Misa finalizado el rezo del Rosario, a las 9 de la mañana aproximadamente en la iglesia del convento de San Francisco, donde un año más ya quedará en su altar y permanecerá el Simpecado de la Hermandad Matriz de Montemayor hasta la próxima romería del mes de mayo.
Presentación de los niños a la Virgen. Pero antes de la celebración de los cultos y traslado del domingo, tendrá lugar en la tarde de este sábado, a partir de las 18.00 horas en la iglesia parroquial, uno de los actos mas entrañables de los que se celebran a lo largo del año, la presentación a la Virgen de los niños bautizados desde octubre del año anterior, acto en el que a los pequeños se les impone la medalla de la hermandad. Un centenar de niños aproximadamente serán presentados a la Patrona de Moguer por sus padres o abuelos en la tarde del sábado.
El traslado 2016 a la ermita, clausura de un año «singular». 2016 ha sido un año singular que precisamente comenzaba hace algo más de 12 meses, el 4 de octubre del pasado año con la presentación del cartel anunciador y del programa de cultos conmemorativos de las Bodas de Plata de la Coronación, un año que también en la romería fue singular a causa del mal tiempo, que provocó que la función presidida por el cardenal Amigo Vallejo se tuviera que celebrar en el interior de la ermita y no en la explanada trasera, de la misma forma que la procesión tuvo un desarrollo inédito, solo llegando la Virgen sólo a la casa de los mayordomos, para volver después a la explanada delantera para presentarse a las filiales, presentación que de nuevo por el mal tiempo se realizó dentro de la ermita, dando lugar a una estampa antes nunca vista en la romería moguereña.
Y singular sobre todo ha sido el año 2016 como se ha expuesto por la celebración del XXV Aniversario de la Coronación, con varios actos previos al mes de junio, como fueron dos encuentros diocesanos, uno de grupos de jóvenes y otro de hermandades de la provincia, antes del mes de mayo. Ya en junio el día 5 se trasladaba de forma extraordinaria la Virgen a Moguer para que presidiera los actos que en su honor se iban a celebrar por el XXV Aniversario de su Coronación, una exaltación en el Monumento conmemorativo de la Coronación pronunciada por el hermano mayor Joaquín Luís Domínguez, que dio paso a un ofrenda floral el día 11, un Rosario de Acción de Gracias y un besamanos por primera vez a la Virgen, otro acto singular realizado por primera vez que congregó en la noche del día 15 en la que se cumplía cronológicamente el XXV Aniversario, y la madrugada ya del día 16, a miles de moguereños que no quisieron dejar pasar la oportunidad una oportunidad histórica de tener frente a frente a la Virgen de Montemayor.
Junto con el Besamanos otro acto que ya es historia de la singular devoción de Moguer a su Patrona fue en la tarde noche del día 18 y madrugada del día 19 la procesión extraordinaria por el mismo recorrido del día de la Coronación, para la que una comisión creada a tal efecto engalanó todas las calles por las que pasó la Virgen, a cuyo paso fue recibida por multitudinarias lluvias de pétalos, una noche que Moguer tardará en olvidar.
Los actos continuaron con una Vigilia de Espigas junto con la Adoración Nocturna el sábado 25 de junio, el traslado de la Virgen el 19 de agosto al Convento de las Hermanas de la Cruz, donde permaneció una semana, la celebración de la Novena y los cultos de la velada, durante la que ha permanecido abierta en la caseta de recepción del ayuntamiento una exposición conmemorativo de los 25 años de la Coronación.
Y de nuevo llega octubre, mes que este año también será singular para un grupo de moguereños que desde hace nueve años integran la Junta de Gobierno de la Hermandad Matriz, ya que si todo se cumple como está previsto el traslado de la Virgen a la ermita será «el último» acto oficial que celebren, ya que actualmente está abierto el proceso electoral, cuya presentación de candidatura finaliza el 4 de noviembre, y convocado cabildo de elecciones para el 2 de diciembre. Un año donde a pesar de que se ha utilizado muchas veces la palabra “último”, no se ha dejado de trabajar en ningún momento con la misma ilusión y fuerza por engrandecer todo lo que rodea el nombre de Montemayor.
Como decía Juan Ramón “yo me iré…”, y quienes hoy integramos la junta de gobierno estamos llamados a dejarla antes de que finalice el año, pero Ella siempre permanecerá en el Montemayor de Moguer bendiciendo a todos sus hijos, y desde allí se seguirán escuchando repicar las campanas cada vez que llegue mayo, junio, agosto o octubre cada año.