Redacción. Como cada 29 de agosto, San Juan del Puerto ha recordado el martirio de su Patrón San Juan Bautista, conocida popularmente como ‘la Degollación’. Con un tríduo preparatorio los días 26, 27 y 28, ayer lunes día 29 tenía lugar en el templo parroquial la misa pontifical cantada por la Coral de la Cena de Huelva y presidida por el Obispo de la diócesis onubense José Vilaplana Blasco. La Corporación Municipal presidida por la alcaldesa Rocío Cárdenas Fernández y otras autoridades locales, estuvieron presentes en la ceremonia sanjuanista.
Una celebración que tuvo un marcado carácter conmemorativo y de acción de gracias puesto que se cumplía 50 años de la fundación de la Escuela Parroquial ‘San Juan Bautista’. A su finalización, los asistentes se trasladaron a la Plaza de los Toros donde en la fachada de la antigua escuela, hoy parte trasera de la Residencia de Mayores ‘San Joaquín y Santa Ana’, tuvo lugar el acto de descubrimiento de una lápida por esta efeméride que dará paso a las actividades propias del Cincuentenario.
El director de la Escuela, Miguel Pérez Villegas intervino en primer lugar “D. Domingo Fernández García fundó nuestra Escuela Parroquial con vocación de servicio queriendo dar respuesta a la situación existente, preocupado por ofrecer a la sociedad sanjuanera los medios necesarios para impulsar el motor de la educación y la formación de los jóvenes que más tarde serían la base sólida de dicha sociedad”. Seguidamente el párroco Victoriano Solís manifestaba “mis palabras no quieren ser otra cosa que la gratitud de la parroquia a la memoria de Don Domingo Fernández García que encontró en su sacerdocio la escuela pública como vocación específica”.
Antes de descubrir la lápida conmemorativa, el Obispo de Huelva José Vilaplana, visiblemente emocionado- pidió a los presentes le dejaran soñar por unos momentos “no hay casualidades, de pequeño sentí la vocación y hubo personas que me ayudaron bastante y miren por dónde el mismo Obispo de Huelva que bendijo este colegio, José Mª García Lahiguera, unos años después vino a Valencia confiriéndome las sagradas órdenes nombrándome ‘Rector del Seminario Menor’, fue el que tuvo mi compañía hasta momentos antes de morir y qué bonito pensar que hoy cincuenta años después estoy en este mismo lugar que él bendijo” -subrayó.
El azulejo que ya luce en la fachada dice: “Para perpetua memoria y gratitud en este lugar, hoy Residencia de Mayores, el 29 de agosto de 1966, fiesta de la degollación, el cura párroco, Rvdo. Sr. Don Domingo Fernández García, fundó la Escuela Parroquial San Juan Bautista siendo bendecida por el siervo de Dios, venerable José María García Lahiguera, Obispo de Huelva. San Juan del Puerto, 29 de agosto de 2016. Cincuentenario de la Escuela Parroquial, año de la misericordia”.
Durante su intervención, el obispo de Huelva señaló la emoción que le producía el hecho providencial de que hubiera sido, hace cincuenta años, su antecesor en la sede onubense, el Venerable siervo de Dios José María García Lahiguera, quien hubiera bendecido la Escuela Parroquial, y que él -que había conocido al siervo de Dios, que le había conferido las órdenes sagradas, que le había nombrado rector del seminario menor de Valencia, que fue su arzobispo, que lo trató incluso días antes de morir, que confió en él- fuera ahora el que hubiera venido a San Juan del Puerto a dar gracias a Dios por la escuela fundada por D. Domingo.
Además, recordó que él había ido a una “pequeña y sencilla escuela de un pueblo de la montaña de Alicante”, -como lo había sido la Escuela Parroquial-, y que después fue al seminario, donde “me costó adaptarme al nivel cultural de mis compañeros, pero hubo gente que me ayudó”, por lo que animó a todos los miembros de la comunidad educativa a seguir adelante con esta importante labor.
Por su parte, el párroco de la localidad, Victoriano Solís, quiso subrayar el recuerdo agradecido “al hombre, al sacerdote, que, siguiendo su vocación de servicio, fundó una Escuela para los sanjuaneros, en un momento en que la oferta educativa estaba bajo mínimos en una población que crecía en el entorno del Polo de Desarrollo. No podemos dejar de ver en ello una intuición que el Espíritu Santo puso en el corazón del sacerdote que entonces os servía como Pastor”.
El director del centro, Miguel Pérez, también resaltó la figura del entonces párroco de San Juan del Puerto, Domingo Fernández, gracias a quien “tantas personas recibieron su ayuda para encontrar un trabajo o en sus dificultades económicas. Los jóvenes con el Club Junior, con la Rondalla San Juan Bautista, con la Banda de Tambores y Cornetas Nuestra Señora del Carmen, conocieron también su servicio y apoyo”.
La Coral de la Sagrada Cena, una vez descubierto el azulejo, ofreció un canto de acción de gracias. Numerosas personas asistieron a este histórico y emotivo acto al que había antecedido la celebración eucarística ofrecida por la parroquia y la hermandad sacramental de San Juan Bautista con motivo de la fiesta del Martirio del Santo Patrón.