Ana Rodríguez. José Ángel Ruiz Adán tiene 52 y es natural de Huelva capital, en concreto vivía en el populoso barrio del Huerto Paco, donde pasó su infancia y juventud. Estudió en el colegio Salesianos y en el instituto La Rábida, licenciándose posteriormente en Química Industrial.
Pero su carrera laboral acabó llevándolo por medio mundo, habiendo trabajado en empresas de su sector tanto en España como en Reino Unido, Italia y Malasia, llegando incluso a adentrarse durante un breve periodo de tiempo en el mundo de la enseñanza cuando residía en Irlanda.
Entre una cosa y otra, José Ángel lleva ya una década viviendo en el extranjero, encontrándose actualmente en la ciudad británica de Yarm, al noreste de Reino Unido, donde es lead engineer en una fábrica de catalizadores. Su deseo de aventura y de mejorar su inglés fueron las motivaciones que lo empujaron a mudarse a este país europeo hace tantos años, una oportunidad que se le presentó mientras trabajaba en una empresa química en Huelva con sede central en Inglaterra.
En todo este tiempo, el onubense también ha trabajado en otras empresas químicas y farmacéuticas británicas, siempre como ingeniero de procesos, aunque estuvo bastante tiempo moviéndose por Italia y Malasia como él mismo nos cuenta:
– ¿Además de en Yarm, dónde más has vivido?
– Anteriormente he vivido en Irlanda, Italia y Malasia. Irlanda fue la primera etapa. Aventura, aprendizaje de inglés, y también una corta experiencia como profesor de instituto. En Irlanda me acostumbré a la cerveza Guinnes. A Italia fui trasladado por mi empresa, Tioxide, desde Inglaterra. Allí conocí a mi mujer y nació mi primera hija. Desde Italia a otro proyecto en la fábrica de Malasia. Allí nació mi segunda hija. Inglaterra, Italia y Malasia siempre con la misma empresa. Me permitió comparar las diferentes culturas. Realmente enriquecedor.
– ¿Cómo te desenvuelves con el inglés?
– Bien, pero no suficiente para entenderlo todo y pillar todos los chistes, por ejemplo. Siempre es una barrera. Pero bien, lógicamente después de tantos años y esfuerzo pues tengo el nivel suficiente para relacionarme y poder desempeñar mi trabajo.
– ¿Cómo llevas el clima y el carácter de los ingleses?
– Lo peor del clima oscuro y frío es adónde llevas a las nenas. Son pequeñas, tienen cuatro y cinco años. Demasiado tiempo indoor. Cuando estaba aquí soltero, la verdad no me importaba el clima. Los ingleses son fríos comparados con los españoles o italianos. Me siguen sorprendiendo. Para mí a veces esa frialdad roza la falta de educación. No todos son así, pero muchos sí.
– ¿Cuáles son las costumbres o tradiciones de allí que más te gustan?
– La organización, la puntualidad, la seriedad para cumplir los compromisos, la profesionalidad, la eficiencia en los horarios laborales.
– ¿Y las que detestas?
– Los ingleses como normal general no saben salir de noche sin emborracharse. Bueno, no todos. Algunos sencillamente no te saludan cuando te los cruzas en el pasillo en el trabajo, o en la calle. O te encuentras a compañeros en el supermercado y te dan un saludo bien cortito, o se hacen los despistados. Pueden llegar a ser desagradables. En general no se come bien. No le dan importancia a la comida. Prefieren comer mal y así ahorrar para viajar.
– Cuéntanos alguna anécdota que te haya ocurrido durante tu estancia.
– En Malasia me metí en un entierro chino pensando que era un bar. Me di cuenta después de un rato. ¡¡Fuerte!! En Reino Unido. cuando llegué hace ya cerca de 10 años, no había muchas cafeterías y en los pubs no servían café. Yo tenía la costumbre de tomar un café al salir del trabajo, cada día en un pub diferente. Al pedir un café me ofrecían de su propia kettler, gratis. Estuve tomando café gratis durante un tiempo.
– ¿Cuál es tu lugar favorito de tu nueva ciudad?
– Una cafetería donde ponen un café lo más parecido a lo que hay en España, y el río, y los paisajes verdes, los parques. Es bonito
– ¿Y de la provincia de Huelva?
– La sierra y las playas de Huelva son de primer nivel. La gastronomía una maravilla.
– ¿Qué piensa tu familia y amigos de tu aventura?
– A mi familia le gustaría que viviera en Huelva, lógico. Ya se han acostumbrado, pero es difícil para mi madre que no pueda disfrutar de sus nietas. Eso la verdad no lo lleva bien y yo pues tampoco. A los amigos intento verlos cuando voy a Huelva. El contacto siempre intento mantenerlo.
– ¿Cuáles son tus planes futuros?
– Creo que ya me toca volver a España. Ése es mi deseo. Cualquier sitio de España estaría bien. Ahí andamos, pendiente de las oportunidades. No es fácil.
– ¿Recomiendas a todo el mundo que viva un tiempo fuera de España? ¿Por qué?
– Sí, el mundo es grande y diverso, y merece la pena conocerlo. Una temporada fuera te enriquece.
– Para terminar: un mensaje a los onubenses.
– Que se sientan orgullosos de su tierra y de sus tradiciones. Al mismo tiempo que intenten siempre mejorar, innovar, que sean emprendedores y que tengan una filosofía de formación continua para toda la vida. A mi país le deseo lo mejor. Hay muchas cosas que copiar de los países de nuestro entorno. No todo se debe copiar, sólo lo bueno. Inglaterra, Alemania,… ¡no están tan lejos!
Muchas gracias.