Redacción. Con el público puesto en pie aplaudiendo a los artistas finalizó el pasado sábado 13 de agosto el concierto “Hot Swing” que ofreció en el patio del Faro de Mazagón la formación Stringville Quintet, que hizo vibrar a los espectadores con su interpretación de grandes éxitos del swing de ambos lados del Atlántico.
El quinteto que integran Damián Fernández al saxo soprano, David Carmona al violín, Antonio López al contrabajo y las guitarras de Rafa López y Fran Carmona, actuaba por vez primera en Huelva tras ofrecer varios conciertos por distintos escenarios de nuestro país y encandilaron al público de Mazagón que vibró durante más de una hora con las excepcionales interpretaciones de estos grandes músicos con una dilatada formación académica a sus espaldas, que interpretaron, entre otros, temas del mítico Francia, responsable hace 80 años del inicio del jazz y el swing en nuestro continente.
La singularidad de este grupo francés y lo que supuso su música para la libertad en el continente, y para el propio desarrollo de la música jazz cuando en USA imperaban el desencanto y la ley seca, llevaron hace unos años a este grupo de músicos con un profundo conocimiento de las raíces del jazz que integran hoy el Stringville Quintet, a estudiar la trayectoria y los repertorios de esta formación a la que rindieron homenaje con el espectáculo Hot Swing que pudimos disfrutar en el singular espacio del patio del Faro de Mazagón.
El virtuosismo de Damián Fernández al saxo soprano, que este músico convierte en un verdadero torrente de emociones; el increíble dominio del violín de David Carmona, capaz de destilar de este instrumento clásico todo el ritmo y la fuerza del mejor swing, el dominio y la depurada técnica del gran contrabajista Antonio López, y el calor y el sentimiento de las guitarras de Rafa López y Fran Carmona, responsables de marcar los ritmos y los tiempos del extraordinario concierto que pudimos disfrutar en el Faro, fueron capaces de cautivar desde el primer momento al público que llenaba el recinto, que no paró de seguir el compás y de aplaudir calurosamente cada uno de los temas de un espectáculo que sin duda quedará en la retina y el corazón de quienes tuvimos la fortuna de disfrutar de él.
El concierto concluyó con los espectadores en pie jaleando a los intérpretes que debieron realizar algún biss para complacer a un público entregado que reconoció con un interminable aplauso la excepcional velada musical que les ofreció el Stringville Quintet.
