Rosa Mora. Llegó a Australia en noviembre de 2014, siendo su primera parada Gold Coast, localidad emplazada en la costa este del país, en el estado de Queensland. Una ciudad en la que nuestro ‘Onubense por el Mundo’, Fernando García Blanco, ha vivido durante más de 15 meses hasta que finalmente se mudara a Melbourne, metrópolis en la que reside actualmente.
Licenciado en Arquitectura por la Universidad de Sevilla, el joven de 27 años decidió probar suerte en el extranjero tras terminar su formación en la capital hispalense. El complicado mercado económico español en general, y el castigado sector de la construcción en particular, animaron al onubense a arriesgarse y emigrar en busca de oportunidades laborales que le permitieran desarrollarse profesionalmente. Y así fue como decidió mudarse a las antípodas, un lugar, cuenta a este medio, que le resultaba atractivo por la posibilidad de aprender inglés, disfrutar del buen tiempo que caracteriza a la zona donde se trasladó, y lo suficientemente lejos para –en un principio- no volver cuando se le presentaran las primeras dificultades.
Tras compaginar durante los primeros meses diversos trabajos, pronto consiguió que un importante estudio de arquitectura de Gold Coast le ofreciera la oportunidad de formar parte de su equipo. Ahora reside en Melbourne. Huelva Buenas Noticias ha conversado con el onubense.
– ¿Por qué Australia?
– Necesitaba aprender inglés desde cero y siempre he sido muy familiar, de mi gente. Nunca me fui de Erasmus y pensé que todo esto sería un cambio duro -al menos al principio-, duro pero necesario para mi formación. Pensé entonces en una desconexión total, no poder mirar atrás y volverme si las cosas fueran mal, Australia estaba muy lejos y no es barato llegar.
Aunque esas fueran las razones principales: Australia es Australia, playas, naturaleza, una muy alta calidad de vida y un clima envidiable, incluso mejor que el de España. Pensar en irme al norte de Europa, pasar frío y ver llover casi durante un mes consecutivo, eso no está hecho para mí.
– Cuéntanos, ¿Dónde trabajas actualmente?
– Pues he dado muchas vueltas para llegar a donde estoy ahora mismo. La verdad es que nunca sabes lo que te tiene preparado la vida y dónde. Estoy trabajando en un estudio de arquitectura que está buscando expandirse aquí en Australia. Solo llevo 3 semanas en este trabajo, hasta ahora he realizado tareas básicas dentro de la arquitectura, diseño y dibujo de viviendas plurifamiliar -bloque de pisos- y una reforma y ampliación de una vivienda pareada.
– Antes de llegar a Melbourne viviste en Gold Coast, ¿Cómo fue la experiencia en esa ciudad?
– Si recordaré Australia será más por Gold Coast que por Melbourne, pues allí pasé alrededor de 15 meses. Para mí esa fue ‘la Experiencia’. Playas increíbles en una de las mecas del surf, mucha fiesta y muy buena gente que encontré también persiguiendo sus sueños. Allí me abrí desde cero a una nueva cultura, muchas de ellas juntas: idioma, amistades…
En los diferentes aspectos de la vida es difícil salir de tu zona de confort. El principio no fue fácil, pues echaba de menos lo mío. Pero no había otra, me tuve que adaptar. Igual que en lo profesional, venía de haber estudiado una carrera «buena» para verme recogiendo vasos en discotecas, limpiando platos en restaurantes o en la parrilla de un restaurante mexicano pasando mucho calor. Aunque los sueldos aquí son muy altos – entre 12 y 17 euros mínimos por hora- la calidad de vida también lo es, por lo que, si no estás trabajando, los ahorros se te esfuman rápidamente. Fueron cuatro meses duros, aunque a día de hoy una experiencia profesional que no cambiaría por nada. Cuando conseguí ‘chapurrear’ el inglés y, tras mucho insistir, conseguí una oportunidad en un estudio de arquitectura -uno realmente bueno-, me probaron, les gusté y estuve diez meses con ellos. Después fue cuando me vine a Melbourne.
– ¿Estaba en tus planes desarrollar tu carrera fuera de España?
– Siempre había tenido curiosidad por ello, pero seguramente si hubiese visto la posibilidad de prosperar en España me hubiese quedado. La situación económica me dio el pequeño empujón que me faltaba, y es que pienso que labrarse un futuro profesional desde cero en España es una lucha contra marea por las circunstancias actuales, sobre todo en mi sector, el de la construcción.
– Y volviendo a Melbourne, ¿es una ciudad agradable para vivir?
– Es una ciudad impresionante, aunque no hace mucho que llegué ya me he enamorado. Transporte público gratis en el centro de la ciudad -aquí el centro es muy grande-, una profunda admiración por la arquitectura, el arte, el buen gusto y la gastronomía, cosas que no he podido apreciar en el resto de Australia, y es que los propios ‘aussies’ (australianos) llaman a Melbourne la ciudad europea de Australia. Mi única pega es el clima, menos bueno que el del centro y norte de Australia que es a lo que ya me he acostumbrado.
– ¿Algún rincón favorito?
– El barrio de Fitzroy, es una zona llena de impresionantes grafitis y arte por todos lados. Es un barrio bastante bohemio que ahora se está modernizando y tiene muy buenos locales y terrazas.
– ¿Cómo es tu día a día?
– Voy al trabajo por la mañana con una jornada de ocho horas con una más para descansar en medio; deporte diario; cenar; prepararme la comida del día siguiente, y una película, serie, o lectura antes de irme a dormir, aunque a veces sustituyo eso último por una cerveza -pero hay que ser cuidadoso si se trabaja al día siguiente-.
– ¿Qué valoras de forma más positiva tu experiencia en Australia?
– El idioma y perderles el miedo a grandes desafíos. Todo es posible si confías en ti mismo y te fijas un objetivo realizable.
– Y tu familia, ¿qué pensó cuando tomaste la decisión de marcharte?
– Dudaron por un segundo, ya que por mucho que nos acostumbremos a que la gente joven migre o a la internacionalización en general, Australia sigue sonando como algo de otro mundo. Lo tenía todo muy calculado y bien pensado, que es como suelo hacer las cosas. Mi familia sabe que no soy una cabeza loca, así que se lo expliqué todo con mucho detalle, ellos me vieron con ilusión y seguridad en mí mismo y me apoyaron en todo.
– ¿Qué echas más de menos?
– Familia, amigos y comida.
– ¿Está en tus planes volver a España? ¿A Huelva?
– A España sí, a Huelva no creo, al menos a corto plazo. Me planteo seguir viajando y conociendo mundo y diferentes perspectivas de ver y hacer las cosas. A saber dónde acabo.
– ¿Cuáles son tus aspiraciones a corto plazo?
– Me gustaría hacer un máster, pero no se aún dónde lo haré.
– ¿Qué mensaje mandarías a los onubenses? ¿Les recomendarías viajar?
– Lo recomiendo por encima de cualquier otra cosa, no sólo por el idioma, que parece lo más obvio, sino por la experiencia de superación y lucha que supone. Por supuesto puede ser duro, pero como cada experiencia dura a la que nos enfrentamos, después no quedan los malos momentos, si no los buenos recuerdos, las lecciones, incluso las malas experiencias nos endurecen para afrontar el próximo contratiempo que nos tenga preparada la vida. Tenemos muchos años para volver y vivir la vida que queramos donde queramos, pero siendo jóvenes y no teniendo ataduras familiares es el momento perfecto para salir ahí fuera y ver lo que tiene el mundo que ofrecernos. Las ataduras y excusas nos la ponemos nosotros mismos.
– Muchas gracias, Fernando ¡Suerte!
9 comentarios en «Fernando García, un onubense que trabaja en Australia en un estudio de arquitectura»
Fernando me alegro por ti, te lo mereces al ser un persona que se piensa tanto los cosas antes de hacerlas
Gran entrevista, y mucho ánimo a Fernando en sus andaduras australianas, deja claro que quien persigue un objetivo lo acaba logrando. Además sale muy facka en esa fotito haciendo surf, las mujeres habrán caído rendidas a sus pies por esas tierras.
Te mereces todo lo bueno que te pase Fernando.
Australia es Australia y los Audtralianos mucho Australianos el alcalde.
Nos ha encantado. Doy fe de todo lo que dices. Nosotros estamos viviendo en un pisito la mar de apañado por aqui por el barrio de Fitzroy. Se te ve muy contento en las fotitos de los canguros jeje. Eres un bohemio y un gran soñador que consigue todo. Un beso y animo. A ver si nos vemos onubense.
Eres un claro ejemplo de superacion. Ya apuntabas maneras. Eres un bohemio y soñador. Nosotros estamos viviendo en un pisito en el barrio de Fitzroy, tu rincon favorito. A ver cuando nos vemos fiera. Un abrazo
Llegarías donde te lo propusieses, así pensábamos todos cuando veíamos como te ganabas la vida vendiendo apuntes fotocopiados de Geometría descriptiva que ya ni te hacían falta, o ganándote el dinero para poder comprar esas Nike Air Jordan último modelo repartiendo bombonas de butano por la capital onubense junto a tu amigo Juan. Ejemplo de superación y buena persona.
Me dijistes que ibas a por tabaco, y al final resulta que estás en Australia…
Ole ahí mi amigo Fernando, pronto de vuelta a España para empezar con CWS Arquitectura y Urbanismo. Un abrazo grande!!!!!
Felicidades Fernando! Es una alegría ver que todos vamos encontrando nuestro camino. Me siento muy orgulloso de ti, el esfuerzo merece muchísimo la pena. Nos vemos pronto si Dios quiere, un abrazo fortísimo!