Redacción. La Biblioteca Municipal de Isla Cristina muestra a partir del 1 de abril un nuevo Documento del Mes, en este caso, el ‘Libro de los nacidos y muertos en este año de 1822’.
Antes de que en 1871 comenzara a funcionar el actual Registro Civil, hubo varios intentos de creación del mismo a lo largo del siglo XIX, intentando, de la mano del liberalismo imperante, que sus funciones no dependiesen, como hasta entonces, de los registros parroquiales.
Sin embargo, esta primera prueba del Archivo Municipal isleño no es más que una relación del entonces párroco, el padre Mirabent, quien a 15 de diciembre de 1822 envía al Ayuntamiento un listado “de los nacidos y muertos”, esto es, de los que según constaba en los libros sacramentales de la parroquia de Nuestra Señora de los Dolores se habían bautizado y habían sido enterrados en dicho año de 1822.
Este libro viene además con el visto bueno del entonces alcalde, Pedro Feu, y la firma de los diferentes regidores y munícipes, que avalan así la autenticidad de lo presentado por la institución religiosa a la municipal.
La existencia de esta documentación es aún mayor, puesto que, una vez destruido prácticamente en su totalidad el archivo parroquial y aún no habiendo empezado el Registro Civil, estos diferentes libros son los únicos conservados donde quedaron asentados los isleños de los años centrales del siglo XIX, tanto en nacimientos, matrimonios como defunciones.
En el caso de estos últimos, por ejemplo, nos ofrecen una valiosa información complementaria, como es, por ejemplo, las localidades de origen de los contrayentes, el nombre de sus padres y, en ocasiones, las profesiones.
Así, junto, a los censos y padrones de la anterior sección, se puede conseguir un amplio muestreo de la sociedad decimonónica de Isla Cristina.