Antonio José Martínez Navarro. Un amigo, de los que nos honramos con su amistad y que sigue desde hace muchos años la Historia Menuda de Huelva, nos ha solicitado que en uno de estos trabajos de investigación hiciéramos hincapié a la presencia de los Gigantes y Cabezudos en nuestros cortejos festeros y como cualquier tema histórico de Huelva nos merece el máximo respeto vamos a indagar en nuestro Archivo con el fin de complacerlo.
Y en verdad tenía razón. La nota singular que en cualquier cabalgata representan el jocoso y animado grupo aludido no se ha repetido mucho en las calles y plazas de nuestra capital. Recordemos algunos de estos lances:
La primera de estas referencias históricas nos la cede el diario “Odiel” del día 30 de mayo de 1952, fecha en la que el Frente de Juventudes conmemoraba brillantemente la fiesta de San Fernando, su Patrón, y en la que quedaba inaugurada la Escuela de Aeromodelismo en la calle San José:
<<Ayer, festividad de San Fernando, Patrón de las juventudes españolas, la Delegación Provincial de Frente de Juventudes, organizó diversos actos en su homenaje, dentro del programa general que viene desarrollándose bajo el nombre de Semana de San Fernando y entre los cuales destaca la inauguración de la Escuela de Aeromodelismo.
Por la mañana, entre el general regocijo, Gigantes y Cabezudos salieron de la Delegación Provincial y recorrieron las principales calles de la población.
La Escuela de Aeromodelismo ha sido instalada en un local que el Frente de Juventudes tiene y habilitado para otras actividades en la calle de San José…>>.
Las tradicionales fiestas, vinculadas a lo que significa Hispanoamérica, que se celebran cada año en la simpática barriada de la Hispanidad no solían faltar la cohorte de Gigantes y Cabezudos. Así, las de 1986 tuvieron un especial programa que vamos a recordar: el pregón fue llevado de la mano de Pragmacio Salgado, llegado ex profeso de Madrid que, con su lirismo habitual, dejó una huella indeleble en la citada barriada; fue coronada Reina de las fiestas Ana María Márquez Rivas y, como ordena la tradición, y formaron su corte de honor veinticuatro damas, actuaron los grupos flamencos ”Suárez” y el Coro Flamenco de Nuestra Señora del Pilar, dirigido por Mari Pulido, se presenciaron diversas competiciones deportivas… El día nueve de octubre de la citada datación, se abrieron los actos con el habitual recorrido de Gigantes y Cabezudos por las calles de la barriada… Y, ¡cómo no…! se celebró la tradicional y emotiva procesión por las calles de la Hispanidad en honor de Nuestra Señora del Pilar.
Para futura nostalgia, para recuerdo en el mañana de los que eran niños entonces, la Cabalgata de los Reyes Magos a lo largo de años recorrió las calles de la capital onubense con un grupo de gigantes y cabezudos. La grey infantil, colmando el fruto de su fantasía, veía a las descomunales cabezas bailar al son de la música perfectamente interpretada por la Banda Municipal. Pero, los munícipes onubenses, rompiendo la historia y la tradición de esta Cabalgata en este aspecto, no trajeron los Gigantes y Cabezudos a las comitivas que deambularon por nuestras calles en los años 1989 y 1990. En los Reyes Magos del día 5 de enero de 1991, en el que fueron elegidos para reencarnar los regios papeles de los Magos de Oriente, Miguel Báez Spínola “Litri”, José Gordillo y un funcionario municipal, dieciséis carrozas con los clásicos temas infantiles recorrieron las calles onubenses lanzando al aire cinco mil quinientos kilos de caramelos y confetis y repartiendo durante el trayecto cinco mil globos, volvieron a traer a los Gigantes y Cabezudos que, como se había dicho anteriormente, habían estados ausentes los dos años anteriores en la singular y alegre Cabalgata.
En las diversas celebraciones onubenses a lo largo de su historia los Gigantes y Cabezudos no tuvieron cabida, ya que en San Sebastián, Coso Blanco (donde los carruajes, atuendos de los participantes, caballos y papelillos y serpentinas eran de color níveo) y Fiestas Colombinas no pintaban para nada los simpáticos cabezones.
Y como homenaje al excelente Teatro Lírico de Huelva y aunque nos apartemos un tanto de nuestro tema central, recordemos que en la celebración del X aniversario de esta formación trajo al proscenio del Gran Teatro, en dos funciones en las que intervinieron más de un centenar de personas y que se celebraron el viernes 28 y el sábado 29 de abril de 2006, la zarzuela “Gigantes y Cabezudos” escrita en 1898 por Manuel Fernández Caballero en la que se abordaba el regreso a Zaragoza de los soldados derrotados que lucharon en la Guerra de Cuba y en la que se recogen costumbres aragonesas a través de una historia de amor apasionada.