S. D. Un millón de euros para salvar la temporada pagando a los jugadores y empleados, y 6 ó 7 más para Gildoy recupere lo que dice que ha invertido en el Recre. Ese es el precio que ha puesto Pablo Comas, accionista mayoritario del Decano, según lo publicado por Huelva Información y otros medios.
Es lo que han manifestado los dirigentes de las peñas del Recre al término de una reunión que tuvo lugar en la noche del miércoles en el estadio Nuevo Colombino, en la que Comas transmitió la realidad que vive el Decano y que pasa por la necesidad de encontrar ese millón de euros que es el precio de salida para su marcha.
Según lo relatado por Huelva Información, en palabras de José Antonio Cabrera, presidente de la Federación de Peñas, “Comas se iría mañana, porque está loco por irse”. Eso sí, “con unas condiciones”. Y todo pasa porque la persona que se haga cargo del club “ponga un millón de euros, que es lo que necesita el club para poder llegar a final de temporada”. Y además “seis o siete millones que se estima es lo que ha invertido Gildoy”, si bien con una matización: “no es para hoy ni mañana, dejando claro que ese pago se podía realizar en función de la categoría en la que milite el Recreativo”.
En la reunión, según apunta Cabrera al periódico de Huelva, “muy cordial en todo momento”, Comas también expresó que “no va a poner un duro más porque no lo tiene”, ya que “sus fuentes de financiación, sus prestamistas, los ha perdido a todos, incluso estaba sacando dinero de otras empresas, pero sus socios le han dicho que no ponga ni un céntimo más en el Recreativo”. Y también que “no va a dejar morir al Recre, que no va a ser la persona que lo liquide, que aguantará como sea y que lo primero que quiere es saber que el que venga no lo va a liquidar”.
