Redacción. Este miércoles 23 de diciembre, coincidiendo con el 134 aniversario del nacimiento del poeta Juan Ramón Jiménez, se ha inaugurado este miércoles 23 la octava pieza de este itinerario escultórico con el que el Ayuntamiento y la Fundación Municipal de Cultura de Moguer pretenden perpetuar en sus calles el recuerdo de la universal obra del Nobel moguereño.
Tras las piezas dedicados a los capítulos ‘Platero’, ‘Idilio de Abril’, ‘El Niño y el Agua’, ‘Asnografía’, ‘El tío de las vistas’, ‘Darbón’ y al personaje de Aguedilla, en esta ocasión es el capítulo VI titulado ‘La Miga’ el que inspira la obra diseñada y ejecutada por la artista moguereña Mª José Díaz, licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Sevilla.
Con este trabajo artístico se quiere también rendir de manera especial un merecido homenaje a la figura del maestro, por ello la ubicación elegida ha sido la Plaza de la Soledad, junto al antiguo colegio Pedro Alonso Niño, cuya entrada en funcionamiento en 1953, supuso el inicio de la educación oficial para los moguereños y moguereñas.
El acto inaugural se ha iniciado con la actuación de la Banda Elemental del Liceo Municipal de la Música de Moguer y el posterior develado de la nueva pieza conmemorativa por parte del alcalde Gustavo Cuéllar y la autora, que ha dado forma a un hermoso trabajo realizado con acero corten, bronce y acero inoxidable pulido, que conforman un conjunto escultórico que integran las figuras de un maestro y una maestra, bajo la copa del árbol del conocimiento. El develado de la nueva pieza ha sido especialmente emotivo al realizarse mientras el grupo de teatro musical del Liceo interpretaba un tema tan adecuado al momento como ‘Los niños del coro’.
La primera en tomar la palabra ha sido la propia autora de la obra, quien ha asegurada muy emocionada que realizar este trabajo ha supuesto para ella un antes y un después en su carrera personal y profesional, destacando además el cariño con el que ha asumido este reto junto a las personas que la han ayudado a hacerlo posible.
También intervinieron en esta emotiva tarde dedicada a la memoria del autor de ‘Platero y yo’, dos antiguos profesores moguereños, Manolo Burgos y Francisco Díaz, como promotores de este homenaje y representantes de la comunidad educativa que durante más de medio siglo desarrolló su labor docente en el primer centro público que existió en Moguer, el colegio Pedro Alonso Niño.
Hoy son tres los centros de infantil y primaria que funcionan en la localidad, centros que también han estado presentes esta tarde con la lectura de varios textos que destacan el importante papel que juega en la sociedad la figura del maestro. Para agradecer la entrega y dedicación continúa del profesorado, el alcalde, las concejalas de Educación Lourdes Garrido, de Urbanismo Rocío Domínguez y el edil responsable del área de Turismo José Antonio Rodríguez, han entregado a los directores de los colegios Pedro Alonso Niño, Virgen de Montemayor y Zenobia, un platerito que ha sido también realizado por la escultora moguereña.
El acto se ha cerrado con la intervención del primer mandatario local, quien han destacado especialmente la importancia de esta nueva escultura ‘al reivindicarse el papel de los verdaderos héroes de nuestra sociedad, los maestros y maestras’. Cuellar tuvo también palabras de agradecimiento para la autora de la obra, de la que destacó su decisiva aportación a este proyecto museístico, ‘con el que queremos esculpir las palabras de nuestro poeta lírico, para que a través del alma de otros artistas su obra llegue al corazón de los vecinos y visitantes’. Este gran día para la cultura y la educación se cerró con una degustación de chocolate y tradicionales pasteles navideños.
