Redacción. En reconocimiento a toda una vida dedicada a la cuidar de la salud de los demás, ha tenido lugar en el salón de actos del Hospital Juan Ramón Jiménez, el tradicional acto de homenaje que se rinde, como cada Navidad, a todos los profesionales que, a lo largo de 2015, y tras muchos años de intensa actividad, han ido completando su periodo laboral y se han ido jubilando en todos los centros que integran el Complejo Hospitalario Universitario de Huelva: el Hospital Juan Ramón Jiménez, el Infanta Elena, el Vázquez Díaz y el Centro Periférico de Especialidades Virgen de la Cinta.
Un acto que ha reunido a los 82 trabajadores de todas las divisiones profesionales del centro hospitalario que, tras su jubilación, han iniciado una nueva etapa vital, fruto del esfuerzo de años de trabajo constante. Se trata de un emotivo y tradicional encuentro que tiene cada lugar cada mes de diciembre y que sirve de antesala a las actividades navideñas que se irán desarrollando durante los próximos días en los centros hospitalarios con el fin de llevar algo del calor de estas fiestas a aquellos pacientes que no pueden estar en sus hogares en estos días tan especiales.
El acto de homenaje, que ha estado presidido por el director gerente del Complejo Hospitalario, Rafael García Vargas-Machuca, ha contado también con la presencia de todo el equipo directivo, que han hecho entrega a estos profesionales, de los que 44 proceden de la división de enfermería, 25 de la dirección administrativa y de servicios generales y 13 son facultativos, de un diploma conmemorativo y de un pequeño regalo como símbolo del reconocimiento de la institución y de todos sus compañeros por la labor desarrollada durante tantos años.
En representación de todos los trabajadores jubilados durante el año 2015, la doctora Fátima Aburto, que ha realizado parte de su trayectoria profesional en el Hospital Juan Ramón Jiménez como pediatra, ha agradecido en su intervención en nombre de sus compañeros el homenaje recibido en este día y, sobre todo, la satisfacción del deber cumplido.
Familiares, amigos y compañeros de profesión de los compañeros jubilados les han acompañado en esta ocasión tan especial, así como numerosos profesionales de todos los centros hospitalarios que conforman el complejo que, con su asistencia y su apoyo, han querido dejar constancia de su reconocimiento personal a la labor de toda una vida realizando el mayor de los servicios hacia su comunidad, cuidar de la salud de los ciudadanos y de sus familias.