Redacción. Más de cien personas dan vida a los personajes que participan en la escenificación del Belén Viviente de Mazagón, una apuesta por la dinamización de la localidad costera, que cuenta con la implicación de la mayoría de asociaciones ciudadanas. La inauguración del Belén será el domingo a las 12 horas con un vistoso pasacalles.
El Belén Viviente, que alcanza ya este año su séptima edición, es una iniciativa en la que se involucran cada año las asociaciones y comercios de Mazagón, así como numerosos vecinos y vecinas que a título individual participan en este proyecto que pretende aumentar el atractivo para el visitante de esta hermosa playa durante las fiestas navideñas.
Una veintena de escenas y pasajes relacionados con el nacimiento de Jesús y la época en la que éste se produjo se recrean en la parcela donde se ubica el emblemático Faro, un espacio en el que con la colaboración de los Ayuntamientos de Moguer y Palos, la Autoridad Portuaria y el apoyo de empresas locales, se desarrolla esta actividad que cada año despierta una mayor expectación tanto entre los vecinos y vecinas del núcleo costero como en las localidades limítrofes.
Hay que recordar que la entrada al recinto es totalmente gratuita, y se pueden además degustar distintos productos típicos que contribuyen a crear un especial ambiente festivo del que disfrutan por igual pequeños y mayores, aunque se puede colaborar con esta iniciativa ciudadana aportando un donativo al final del recorrido, cuando los visitantes reciben además un certificado de empadronamiento en este Belén de Mazagón que se convierte en uno de los grandes atractivos de la Navidad.
Tras la inauguración el domingo a las 12 horas con el tradicional pasacalles por el centro de la localidad, el Belén podrá visitarse en horario de 11,30 a 14,30 y de 16 a 18 horas, los días 7, 8, 9, 12, 13, 19, 20 y 27 de diciembre, fecha esta última en la que se escenifica también la Adoración de los Reyes.
