Redacción. La luz de la Navidad ha llegado al municipio de San Juan del Puerto. Ha sido este 4 de diciembre, minutos después de las 19.00 horas, cuando en una Plaza de España en la que no cabía un alfiler se encendían las luces del gran árbol de la Navidad que esa misma mañana había sido decorado con adornos por los alumnos de los diferentes centros educativos del municipio.
Antes del encendido, quedaba inaugurado el Belén Municipal por parte de la Corporación Municipal al completo, el cual, ha sido montado en uno de los laterales del hall de entrada del Ayuntamiento. Una bonita representación realizada por el alumnado del Centro de Adultos «Mateo Morales», el Taller Municipal de Artesanía y su monitora Marisa Tirado Cardeñas. El Belén está conformado por más de una treintena de figuras envueltas en un efímero paisaje que servirá para dar la bienvenida a todos los sanjuaneros que durante todos estos días de fiesta se pasen por la casa consistorial.
Acto seguido, la alcaldesa Rocío Cárdenas, acompañada de su hijo, procedía al encendido del árbol navideño; este año instalado delante de la Cruz de Forja de la Plaza y visible desde cualquier punto de la misma. Tiene una altura cercana a los diez metros, cuenta con más de 500 adornos y dispone de dos tipos de luminarias, en led y lámparas convencionales de distintos colores rematadas con una gran estrella.
En los instantes previo al encendido, Cárdenas aprovechó para desear unas felices fiestas a todos los sanjuaneros y a los cientos de vecinos, familias y niños que se acercaron hasta la Plaza de España. «Que tengamos esperanzas en el nuevo año que va a entrar», dijo la primera edil.
Tras una ensordecedora cuenta atrás por parte del público, la alcaldesa pulsaba el botón del encendido, al que siguieron fuertes aplausos de los asistentes. Más tarde apareció bajando las escaleras el mismísimo Papá Noel que arribó hasta el municipio para poder saludar a todos los niños que mostraron su cariño y pudieron hacerse fotos con Santa Claus, que apareció escoltado por dos elfos. En las proximidades, un trineo dispuesto sirvió de photocall para todos los presentes.
Mientras, el ambiente era completamente festivo en esta tarde de diciembre, con una agradable temperatura que hizo que se echaran a la calle numerosas personas que escucharon los sones de la charanga local ‘Échale sal’ y participaron de los talleres de maquillaje navideño y globoflexia, sobre todo los más pequeños que disfrutaron junto a dos castillos hinchables.